/ miércoles 26 de junio de 2024

Los tres pendientes para el desarrollo económico

Durante los últimos años, hemos escuchado reiteradamente el concepto de “nearshoring”, que se refiere al fenómeno de relocalización de centros de producción a México, debido al desencuentro comercial entre Estados Unidos y China a partir de la pandemia. Este evento ha resultado ser una enorme oportunidad para México, ya que varias empresas transnacionales han optado por acercar su cadena de suministro al mercado estadounidense, a través de nuestro país. No es coincidencia que, durante el primer bimestre de este año, según datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos, México se haya consolidado como el principal socio comercial de este país. Esto ha tenido un efecto fácilmente observable en el tipo de cambio y en la balanza comercial entre ambas naciones.

Dicha oportunidad, según expertos en el tema, difícilmente se presentará de nuevo para nuestro país y ya existen claros indicadores de que no se está aprovechando por completo. De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía, en 2023 México recibió una cifra récord de Inversión Extranjera Directa (IED) de más de 36 mil millones de dólares; sin embargo, el 93% de esa cifra fueron reinversiones de empresas ya instaladas en el país. Solo el 7% restante fueron, en palabras de José Medina Mora Icaza, presidente nacional de Coparmex, inversiones “frescas”. Por lo tanto, las cifras reflejan que hay un gran margen de oportunidad que como país no hemos podido aprovechar. Existen tres principales razones que, de resolverse, permitirían al país recibir mayores inversiones y experimentar un crecimiento económico significativo.

El primero es asegurar que exista suficiente abasto energético para toda la industria que busca instalarse en el país. Aumentar la inversión tanto en generación como en distribución de la energía eléctrica es fundamental para atraer a las empresas que ven a México como posible destino. Los recientes apagones a lo largo del país no son una buena señal para los inversionistas.

El segundo es garantizar la seguridad de las empresas y de sus colaboradores. Desafortunadamente, este es uno de los apartados donde el actual gobierno federal quedó a deber a su población.

Por último, es necesaria la existencia de un verdadero Estado de Derecho, donde la certeza jurídica y la impartición expedita y autónoma de la justicia sean la constante. La propuesta que se enviará al Congreso de la Unión en septiembre, que contempla designar a los jueces a través del voto popular, implicaría arriesgarse a someterlos a presiones políticas desde los partidos para promocionar su carrera profesional. Es por eso que dicha reforma no es bien vista por los mercados.

Si realmente el próximo gobierno federal quiere aprovechar esta ventana de oportunidad, que no se encontrará abierta mucho tiempo más, tendrá que orientar sus políticas públicas y esfuerzos en atraer todas estas inversiones. Como bien se dice en el ámbito empresarial, “el éxito es cuando la oportunidad y la preparación se encuentran”. Dicha oportunidad ya está tocando a nuestra puerta. ¿Estamos listos para recibirla?

Presidente de Coparmex Irapuato - Salamanca

Durante los últimos años, hemos escuchado reiteradamente el concepto de “nearshoring”, que se refiere al fenómeno de relocalización de centros de producción a México, debido al desencuentro comercial entre Estados Unidos y China a partir de la pandemia. Este evento ha resultado ser una enorme oportunidad para México, ya que varias empresas transnacionales han optado por acercar su cadena de suministro al mercado estadounidense, a través de nuestro país. No es coincidencia que, durante el primer bimestre de este año, según datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos, México se haya consolidado como el principal socio comercial de este país. Esto ha tenido un efecto fácilmente observable en el tipo de cambio y en la balanza comercial entre ambas naciones.

Dicha oportunidad, según expertos en el tema, difícilmente se presentará de nuevo para nuestro país y ya existen claros indicadores de que no se está aprovechando por completo. De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía, en 2023 México recibió una cifra récord de Inversión Extranjera Directa (IED) de más de 36 mil millones de dólares; sin embargo, el 93% de esa cifra fueron reinversiones de empresas ya instaladas en el país. Solo el 7% restante fueron, en palabras de José Medina Mora Icaza, presidente nacional de Coparmex, inversiones “frescas”. Por lo tanto, las cifras reflejan que hay un gran margen de oportunidad que como país no hemos podido aprovechar. Existen tres principales razones que, de resolverse, permitirían al país recibir mayores inversiones y experimentar un crecimiento económico significativo.

El primero es asegurar que exista suficiente abasto energético para toda la industria que busca instalarse en el país. Aumentar la inversión tanto en generación como en distribución de la energía eléctrica es fundamental para atraer a las empresas que ven a México como posible destino. Los recientes apagones a lo largo del país no son una buena señal para los inversionistas.

El segundo es garantizar la seguridad de las empresas y de sus colaboradores. Desafortunadamente, este es uno de los apartados donde el actual gobierno federal quedó a deber a su población.

Por último, es necesaria la existencia de un verdadero Estado de Derecho, donde la certeza jurídica y la impartición expedita y autónoma de la justicia sean la constante. La propuesta que se enviará al Congreso de la Unión en septiembre, que contempla designar a los jueces a través del voto popular, implicaría arriesgarse a someterlos a presiones políticas desde los partidos para promocionar su carrera profesional. Es por eso que dicha reforma no es bien vista por los mercados.

Si realmente el próximo gobierno federal quiere aprovechar esta ventana de oportunidad, que no se encontrará abierta mucho tiempo más, tendrá que orientar sus políticas públicas y esfuerzos en atraer todas estas inversiones. Como bien se dice en el ámbito empresarial, “el éxito es cuando la oportunidad y la preparación se encuentran”. Dicha oportunidad ya está tocando a nuestra puerta. ¿Estamos listos para recibirla?

Presidente de Coparmex Irapuato - Salamanca

ÚLTIMASCOLUMNAS