En la primera fila de la capilla de San Jorge quedó una silla vacía justo al lado del príncipe William. Según reportes, esto se debería a que los novios decidieron guardar el lugar que hubiera ocupado la princesa Diana en la ceremonia y dejar su puesto vacío como señal de que de alguna forma ella estaba presente.
La tía del príncipe Harry, Jane Fellowes, hermana hermana de Diana leyó un fragmento del libro del Cantar de los Cantares de Salomón (Song of Solomon) que habla de la fuerza y del poder del amor.
"El amor es fuerte como la muerte, pasión feroz como la tumba. Sus flashes son flashes de fuego, una llama furiosa. Muchas aguas no pueden apagar el amor, tampoco las inundaciones pueden hundirlo", dice el texto.
Otra manera de honrar a Diana fue desde que se comprometieron: el anillo que el propio Harry diseñó, contiene un par de diamantes de la colección de la princesa Diana.
Es para “asegurarme que ella esté con nosotros en este loco viaje que emprendemos juntos” dijo el menor de los hijos de Carlos y Diana en una entrevista con la BBC.