Sillas de lujo como en un auto

Nuestro desempeño laboral depende mucho de sentirnos cómodos, para tener una mayor productividad, un mejor nivel de concentración y creatividad.

Uno de los puntos clave para que así sea, es la silla, pues la mayor parte del horario laboral implica estar sentados; esto hará que terminemos la jornada más descansados, ya que puede mitigar las dolencias por la mala postura.

¿Hay algo más cómodo que un asiento de un carro?

Los amantes de los autos podrían estar de acuerdo, en especial con los modelos de racechairs que se ha encargado de cumplir el sueño de sentarse (y sentirse) en uno de los mejores autos de carrera del mundo sin salir de tu oficina.

Cuenta con asientos auténticos de alto rendimiento de los gustos de Ferrari, Lamborghini, Maserati y Porsche; además, combinan el asiento estilo automotriz con bases amigables para el trabajo. Aunque eso sí, una silla de este tipo cuesta alrededor de 11 mil dólares.

No te desanimes, puedes buscar modelos parecidos o que te hagan sentir realmente a bordo de un auto, pero antes de hacerlo, te damos algunos consejos.

CARACTERÍSTICAS DE UNA SILLA DE TRABAJO

Para que la silla cumpla con su función, esta deber ser : adaptable, fácil de manejar y estable; además de lo siguiente :

• Ajustable: te debe permitir ajustar la altura del asiento, del respaldo y la inclinación.
• Tener ruedas y ser giratoria: para facilitarte el desplazamiento
• Respaldo: el apoyo lumbar debe ser cóncavo, con una suave prominencia. Evita las sillas sin respaldo.
• Descansabrazos: son opcionales siempre y cuando no te estorben al acercarte al escritorio.

SIÉNTATE ADECUADAMENTE

• Postura correcta: pasas la mayor parte del tiempo delante de la computadora, debes mantener la parte superior del cuerpo formando un ángulo recto de 90 grados con la parte inferior y apoyando la espalda en la silla.
• Evitar estar estático: es decir, aunque estés correctamente sentado pero sin cambiar de posición por un tiempo prolongado puede ser perjudicial. Se recomienda descansar cada hora, levantarte, estirarte y caminar aunque sea unos minutos.
• Altura del asiento: debes ajustarla de manera que tus codos queden a la altura del escritorio, de manera que al apoyar tu brazo y antebrazo se forme un ángulo recto de 90 grados.
• Posición de los pies: deben quedan bien apoyados en el suelo o en el reposapiés.

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