Con un muy bien presentado encierro de Villa Carmela, dio inicio la actividad taurina en Guanajuato, concretamente en la plaza La Luz, de León, estando en el cartel dos de los toreros que participan en el serial “México busca un torero”; Juan Fernando y “El Rifao”, y arropándolos “El Calita”, Arturo Saldívar, Diego Silveti y Diego Sánchez, resultando triunfadores y a hombros Silveti y Sánchez tras cortar dos orejas, “Calita” una, Juan Fernando silencio y “El Rifao” gustó a la afición por el empeño y valor que puso ante un torote vistiendo de maletilla.
Después de un largo encierro, poco más de un año, los aficionados taurinos de León tuvieron el primero de los cuatro festejos que ETMSA ha preparado para reactivar la tauromaquia en el bajío, sin embargo y pese a permitirse sólo el 11% de aforo ni siquiera eso llenaron, y vaya que el cartel era muy atractivo y los toros fueron eso, toros, máxime que insólitamente habían estado cancelados los festejos por la pandemia del coronavirus.
Hubo de todo y aunque se pensaba que todos los toreros vestirían de charro y campero español, pues se resaltó esa conjunción de culturas, “El Rifao” dijo no, y salió vestido de maletilla, evocando ya desde ahí al añorado “Pana”, pero la gente lo vio bien y toda la tarde le festejó ese detalle.
De la actuación de los diestros anotamos que Saldívar puso la clase, la elegancia y la torería desde que se abrió de capa, con peculiar estilo fue bordando la faena y dejando plasmados pasajes para pinturas, con la muleta se regustó y las expresiones en su cara y ánimo lo reflejaban, la gente también se contagió y le jaleó fuerte cada tanda que pegaba, lástima que con la espada pinchó varias veces y perdió las orejas.
Diego Silveti Estuvo en su estilo también y aunque la gente lo quiere mucho aquí, los olés no fueron contundentes como otras veces, su toro se despitorró al salir y le echaron el reserva, que fue el más chico, pero se dejó torear y al menos tres tandas iba largo y Diego lo aprovechó, coronándola faena con una estocada Recibiendo y lo premiaron con dos orejas.
“El Calita” salió con ganas de agradar, pero aunque tiene cualidades, su estilo no llegó mucho a los tendidos, aún así como mató de una estocada le dieron una oreja. Juan Fernando debe reaccionar si es que quiere funcionar en este difícil mundo del toro, pues tiene figura, técnica, pero poca actitud y no conecta con la gente, pasando desapercibido lo que le hizo al toro.
Diego Sánchez va por buen camino, pero su espigada figura lo hace ver que torea muy despegado y para calentar los tendidos y levantar a la gente de sus asientos hace falta embarrarse al toro, realizó una faena bonita y la remató con un estoconazo por lo que le dieron dos orejas.
“El Rifao” puede llegar a ser un torero cuña en los carteles con su estilo arrebatado, valiente y hasta heterodoxo, dejó ver su hambre, pero también su falta de sitio, que sólo lo dan los toros, y sin ser cosa del otro mundo gustó a la gente y con gusto volverán a la plaza para volver a verlo.