El templo del Guadalupe del puente es uno de los vestigios más emblemáticos de Irapuato, que dio origen a lo que hoy se le conoce como la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe que data desde el siglo XIX.
Este templo de Guadalupe del Puente es uno de los más visitados por miles de irapuatenses, peregrinos y files devotos a la Virgen del Tepeyac, durante el festejo del 12 de Diciembre que durante dos días prácticamente se congregan para llevarle serenata y cantarle las mañanitas por su santo y recordar así el gran milagro que dejo en la tierra de los mexicano plasmado en la Tilma de Juan Diego su imagen, además de que se le agradece por todos los favores que recibieron por su intercepción de los fieles creyentes.
Un poco de historia del Templo de Guadalupe puente.
Se dice que el templo de Guadalupe está ligado con la construcción e historia del puente de Guadalupe, que inició este último en el año de 1825 sobre el río Silao, ahora Blvd. Gustavo Díaz Ordaz y se comenta en esta parte de la historia que varios propietarios de haciendas contribuyeron para la construcción con la finalidad de comunicar esa parte de Irapuato con el camino hacia Salamanca y era conocida como la calle Real de Tierra Adentro o de Salamanca, hoy mejor conocida como la Calzada Insurgentes.
Posterior a la construcción de este puente se noto la afluencia de personas que cruzaban por ese lugar lo que motivo a la construcción de una capilla que más tarde se convertiría en el templo, según los archivos en 1836 en el lugar donde actualmente esta el templo, se encontraba una pequeña capilla de adobe y en 1836 cuando finaliza la edificación del puente los habitantes colocaron el medallón de la Virgen de Guadalupe en el puente con relieve de cantera blanca con la evocación de Guadalupe en 1847, posteriormente se desprende del lugar para colocarlo en un lugar adecuado y ya cuando esta el templo terminado se lo llevan para colocarlo en el altar principal.
La construcción del templo inició el 20 de octubre de 1860 y finalizó el 11 de diciembre de 1877; sin embargo antes de que terminara su construcción, el templo tuvo modificaciones y pausas para completarlo, esto por los conflictos bélicos y políticos que enfrentaba el país.
Los bienhechores de esta obra fueron Manuel José Almanza y el presbítero Juan Nepomuceno García quien este último, fungía como cura capellán del templo con los que se comenzó con una de las tradiciones más arraigadas del municipio que es la vista al templo los días previos al 12 de diciembre.
Se comenta que en el 1846 el cura Manuel José Almanza tomó la decisión de construir el templo a orillas del rio pero no dónde se encuentra actualmente y su cambió de ubicación de la construcción fue influenciado por un milagro que presenció.
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Se dice que Manuel José Almanza iba una vez a ver los trabajos de la construcción del otro templo cuando antes de subir al puente frente a lo que hoy es el templo, las mulas del coche arrojaron a una pequeña niña por el cual pasaron las ruedas del carro y el señor Almanza creyó encontrar a la niña mal herida, pero se sorprendió al ver a la pequeña completamente ilesa y expreso -Aquí se hace el templo de la milagrosa imagen de Nuestra Señora de Guadalupe- por ello el cura decidió construir el templo donde actualmente esta ubicado.
Fuente: Archivo Histórico de Irapuato