León, Gto. (OEM, Informex).- Por fuera llama la atención por angosta, por dentro es una casa hecha con amor y punto de reunión de la familia García. Ubicada en el mero corazón del barrio de San Juan de Dios, la virgen de “Nuestra señora de los Ángeles”, da la bienvenida al hogar en honor a su propietaria María de los Ángeles García Carpio.
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Pasar por el bulevar Mariano Escobedo a la altura de San Juan de Dios, ya es raro ver una casa habitada, la mayoría se convirtieron en locales comerciales o departamentos. Pero el número 415 Oriente, exactamente donde hace muchos años se le conocía como la Plaza de las Vigas, hay una fachada muy pequeña que llama la atención de todo el que pase, que pese al paso de los años sigue siendo habitada.
En entrevista con El Sol de León, su propietaria compartió, la historia de la finca que ha sido el hogar de más de 4 generaciones de su familia. En 1986 tuvo su última remodelación y actualmente es solo habitada por ella.
“Esta casa era de mis abuelos y me trajeron de 7 meses, aquí crecí, me fui cuando me case pero luego regrese hace 37 años”, relata que el terreno era muy grande, sus antepasados lo adquirieron hace más de 100 años y hubo muchos problemas a la hora de la repartición.
A Ángeles le tocó quedarse con la casa cuando falleció su abuela “era una casa vieja, mi esposo y yo decidimos tumbarla y remodelar a nuestro gusto para poder habitarla”.
SUS MEDIDAS
El terreno que habita actualmente tiene un frente de 2.60 metros de ancho por 14 de fondo; se va abriendo hasta casi 4.00 metros, lo más angosto es el frente. Su reducida fachada se debe a que sus vecinos se quedaron con algunos metros de su terreno. La casa cuenta con tres pisos, tres recamaras, un recibidor, sala, cuarto de televisión, 2 baños y medio, patio de servicio, comedor y cocina, sólo vive Ángeles.
En los últimos años ha tenido la intención de venderla y habitar una casa más chica, debido a su edad.
La mayoría de sus muebles son de madera, la casa está adornada con varias vírgenes de las cuales es devota.
“Me encanta todo lo de mi casa, colecciono dedales, los yoyos, tengo una colección y juego todavía con mis yoyos en mis ratos libres”.
EN SAN JUAN DE DIOS
Sobre su barrio menciona que San Juan de Dios, es muy bonito, místico. Años atrás todos los vecinos se conocían, se hablaban, se frecuentaban y se ayudaban, cosa que ya no pasa en la actualidad pues la mayoría ya fallecieron y el lugar se ha vuelto comercial y no habitacional “ya muchos vecinos murieron y sus hijos decidieron hacer de sus casas locales comerciales”.