Los precios al consumidor aumentaron 0.38% en febrero de 2018, por debajo de lo esperado, con lo cual la tasa de inflación anual disminuyó a 5.34%, la menor desde febrero de 2017.
El INEGI informó que la inflación mensual fue resultado de alzas en los precios de gasolinas, huevo y pollo, compensadas parcialmente por bajas en otros productos agropecuarias, así como en gas LP.
Esta tasa anual fue inferior al 5.55% registrado en enero y es la más baja para desde el 4.86% obtenida en febrero del año pasado, según las cifras del INEGI.
A pesar del descenso de la tasa anual, el índice de precios al consumidor registró un alza mensual del 0.38% en el segundo mes del año, agregó el INEGI.
Entre los productos que registraron mayor descenso de precio en febrero pasado estuvieron el tomate, el gas doméstico (GLP), la cebolla y la calabacita.
En tanto, el índice subyacente, que excluye los precios de productos con mayor volatilidad, registró una tasa anual del 4.27% frente al 4.56% de enero y al 4.26% de febrero del 2017.
No obstante, la inflación de México, la segunda economía de América Latina, aún se mantiene por arriba del objetivo del Banco de México (Banxico) de una tasa anual del 3% (+/- un punto porcentual).
El alza de precios respondió entre otros factores al impacto de un fuerte incremento de los combustibles a inicios de 2017, así como a la volatilidad que la moneda local experimentó ante la incertidumbre sobre el futuro de la relación con Estados Unidos, el principal socio comercial de México.
Por ello, la autoridad monetaria ha efectuado constantes incrementos de su tasa de interés de referencia hasta ubicarla en 7,5%.
El Banxico espera que la inflación continúe disminuyendo, aproximándose a lo largo del año a su objetivo del 3%, el cual alcanzaría en el primer trimestre del 2019.
||Con información de Notimex y AFP||