/ miércoles 16 de marzo de 2022

No todos los micronegocios pueden ser digitales, ¿por qué?

Expertos aseguran que en México hay un avance desigual para la implementación de herramientas digitales dentro de los pequeños negocios

La pandemia de Covid-19 representó un gran desafío para todos los sectores de la sociedad. Ante esto, la tecnología se ha convertido en una alternativa viable para facilitar la recuperación de empleos perdidos.

No obstante hay un avance desigual para la implementación de herramientas digitales dentro de los micronegocios. De acuerdo con Juan Sotres y Renata Raya, fundadores de la agencia de comercio electrónico (e-commerce) Triciclo, los principales obstáculos para los micronegocios son: la adversidad al cambio, la falta de experiencia, la ausencia de recursos (económicos y humanos) y la escasez de uso de las herramientas tecnológicas correctas.

Según el estudio Desarrollo Digital 2021, realizado por Centro México Digital, de las 32 entidades del país, sólo Nuevo León, Querétaro, Quintana Roo y Baja California Sur son líderes en la adopción de comercio electrónico, mientras que los estados más rezagados son: Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Tlaxcala, Michoacán, Tabasco, Hidalgo, Morelos, Veracruz, Puebla y Guanajuato.

Los especialistas en e-commerce y quienes han desarrollado el curso “Shopify desde cero”, subrayan que “vender por internet es accesible para todos, aunque no necesariamente es para todos”.

Al respecto destacan que “Es importante identificar tu mercado y si es un producto que es susceptible a venderse en línea y que será un negocio escalable en este canal digital”. Por ejemplo, tiendas de ropa, accesorios, electrónica o muebles son candidatos perfectos para el comercio electrónico.

Por otro lado, cuando se habla de servicios especializados, insumos para la industria o similares, es probable que tener un e-commerce no sea el mejor canal para clientes potenciales, por lo que es importante identificar el público objetivo, dónde pasan tiempo, cuáles son los canales digitales que utilizan, qué redes sociales, cómo se comunican y de ahí, tomar una decisión para ver si el e-commerce se acomoda bien para nuestra empresa.

Según el estudio Digital 2022 elaborado por las plataformas We Are Social y Hootsuite, hoy en día 74% de la población mexicana navega en internet, predominantemente a través de dispositivos móviles, lo que a su vez ha generado más visitas a websites y un mayor uso de las redes sociales en México, traduciéndose en 102.5 millones de usuarios activos de las diferentes plataformas que existen para conectarnos con otras personas.

Esto contrasta con las cifras de The Competitive Intelligence Unit que indican que sólo el 17.2% de las microempresas cuentan con acceso a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC).

En lo que respecta a medios de pagos en tiempos de pandemia, el uso de efectivo ha predominado. Al respecto, Jaime Márquez, Director de nuevos negocios de Sistema de Transferencias y Pagos (STP), fintech que automatiza las transferencias de empresas, señala que “las microempresas son las que principalmente encuentran dificultades para migrar sus métodos de pagos hacia lo digital”.

Datos del Banco de México indican que los atributos que destacan los mexicanos que acostumbran a usar el efectivo son: practicidad, facilidad, rapidez, exclusividad, seguridad y confianza.

Por lo contrario, la Asociación de Agregadores de Medios de Pago (Asamep), calcula que en México en 2021 se realizaron más de 44 millones de pagos QR y en su mayoría han sido gracias a las Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs). Sin embargo, el Cobro Digital (CoDi) no ha logrado concretar los objetivos que fueron presentados por Banxico en el año 2019.

Además, si bien en México un alto porcentaje de la población también está digitalizada, todavía hay un porcentaje de la población rural que carece de acceso a Internet. De acuerdo con cifras oficiales, el 78.3% de la población urbana es usuaria de internet, mientras que en zonas rurales la población usuaria es el 50.4%. Esto por supuesto que también tiene un impacto en el uso de CoDi.

Márquez aseveró que “En cuanto a la baja penetración de CoDi en México, se combinaron varios factores. El lanzamiento de CoDi se dio casi a finales de 2019 y, de cierta manera, coincidió con el inicio de la pandemia. Pero, a diferencia de lo visto con PiX (un medio de pago similar a CoDi) en Brasil, este impactó de distinta forma a CoDi, pues supuso que muchas instituciones financieras no tuvieran oportunidad de registrar sus negocios. Algunos grandes retailers ya permiten pagos con CoDi pero todavía falta una mayor adopción por parte de usuarios como de comercios”.

Argumenta que para el ecosistema del comercio electrónico y las Micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) es importante acceder a métodos como CoDi, que son seguros, de cero contacto y benefician a sus negocios y usuarios finales.

“Sin duda, CoDi potenciará el crecimiento del comercio electrónico. Vemos una gran oportunidad ahí, y esperamos que la transaccionalidad se triplique. Entre más métodos de pago tengan los micro negocios, más beneficios obtendrán sus clientes”, dice Márquez.

Por último, Triciclo comparte 3 consejos para quienes desean emprender en línea: Tener un buen producto, con un buen margen, que cubra una necesidad específica y comprenda un mercado para crecer; considerar una buena plataforma de comercio electrónico que te ayude a gestionar tus ventas en el día a día, y contar con un presupuesto para marketing digital, para poder ampliar tu mensaje y llegar a tu público objetivo.



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No obstante hay un avance desigual para la implementación de herramientas digitales dentro de los micronegocios. De acuerdo con Juan Sotres y Renata Raya, fundadores de la agencia de comercio electrónico (e-commerce) Triciclo, los principales obstáculos para los micronegocios son: la adversidad al cambio, la falta de experiencia, la ausencia de recursos (económicos y humanos) y la escasez de uso de las herramientas tecnológicas correctas.

Según el estudio Desarrollo Digital 2021, realizado por Centro México Digital, de las 32 entidades del país, sólo Nuevo León, Querétaro, Quintana Roo y Baja California Sur son líderes en la adopción de comercio electrónico, mientras que los estados más rezagados son: Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Tlaxcala, Michoacán, Tabasco, Hidalgo, Morelos, Veracruz, Puebla y Guanajuato.

Los especialistas en e-commerce y quienes han desarrollado el curso “Shopify desde cero”, subrayan que “vender por internet es accesible para todos, aunque no necesariamente es para todos”.

Al respecto destacan que “Es importante identificar tu mercado y si es un producto que es susceptible a venderse en línea y que será un negocio escalable en este canal digital”. Por ejemplo, tiendas de ropa, accesorios, electrónica o muebles son candidatos perfectos para el comercio electrónico.

Por otro lado, cuando se habla de servicios especializados, insumos para la industria o similares, es probable que tener un e-commerce no sea el mejor canal para clientes potenciales, por lo que es importante identificar el público objetivo, dónde pasan tiempo, cuáles son los canales digitales que utilizan, qué redes sociales, cómo se comunican y de ahí, tomar una decisión para ver si el e-commerce se acomoda bien para nuestra empresa.

Según el estudio Digital 2022 elaborado por las plataformas We Are Social y Hootsuite, hoy en día 74% de la población mexicana navega en internet, predominantemente a través de dispositivos móviles, lo que a su vez ha generado más visitas a websites y un mayor uso de las redes sociales en México, traduciéndose en 102.5 millones de usuarios activos de las diferentes plataformas que existen para conectarnos con otras personas.

Esto contrasta con las cifras de The Competitive Intelligence Unit que indican que sólo el 17.2% de las microempresas cuentan con acceso a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC).

En lo que respecta a medios de pagos en tiempos de pandemia, el uso de efectivo ha predominado. Al respecto, Jaime Márquez, Director de nuevos negocios de Sistema de Transferencias y Pagos (STP), fintech que automatiza las transferencias de empresas, señala que “las microempresas son las que principalmente encuentran dificultades para migrar sus métodos de pagos hacia lo digital”.

Datos del Banco de México indican que los atributos que destacan los mexicanos que acostumbran a usar el efectivo son: practicidad, facilidad, rapidez, exclusividad, seguridad y confianza.

Por lo contrario, la Asociación de Agregadores de Medios de Pago (Asamep), calcula que en México en 2021 se realizaron más de 44 millones de pagos QR y en su mayoría han sido gracias a las Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs). Sin embargo, el Cobro Digital (CoDi) no ha logrado concretar los objetivos que fueron presentados por Banxico en el año 2019.

Además, si bien en México un alto porcentaje de la población también está digitalizada, todavía hay un porcentaje de la población rural que carece de acceso a Internet. De acuerdo con cifras oficiales, el 78.3% de la población urbana es usuaria de internet, mientras que en zonas rurales la población usuaria es el 50.4%. Esto por supuesto que también tiene un impacto en el uso de CoDi.

Márquez aseveró que “En cuanto a la baja penetración de CoDi en México, se combinaron varios factores. El lanzamiento de CoDi se dio casi a finales de 2019 y, de cierta manera, coincidió con el inicio de la pandemia. Pero, a diferencia de lo visto con PiX (un medio de pago similar a CoDi) en Brasil, este impactó de distinta forma a CoDi, pues supuso que muchas instituciones financieras no tuvieran oportunidad de registrar sus negocios. Algunos grandes retailers ya permiten pagos con CoDi pero todavía falta una mayor adopción por parte de usuarios como de comercios”.

Argumenta que para el ecosistema del comercio electrónico y las Micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) es importante acceder a métodos como CoDi, que son seguros, de cero contacto y benefician a sus negocios y usuarios finales.

“Sin duda, CoDi potenciará el crecimiento del comercio electrónico. Vemos una gran oportunidad ahí, y esperamos que la transaccionalidad se triplique. Entre más métodos de pago tengan los micro negocios, más beneficios obtendrán sus clientes”, dice Márquez.

Por último, Triciclo comparte 3 consejos para quienes desean emprender en línea: Tener un buen producto, con un buen margen, que cubra una necesidad específica y comprenda un mercado para crecer; considerar una buena plataforma de comercio electrónico que te ayude a gestionar tus ventas en el día a día, y contar con un presupuesto para marketing digital, para poder ampliar tu mensaje y llegar a tu público objetivo.



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