Por primera vez en su carrera, Enjambre conquistó el escenario del Teatro del Pueblo en la Feria Silao 2024, con una presentación cargada de melancolía, electricidad y romanticismo ante más de 8 mil asistentes.
Desde las 7:00 de la noche, los fans comenzaron a llegar al recinto. Jóvenes de diversos municipios como León, Guanajuato, Irapuato, Salamanca y, por supuesto, Silao, se dieron cita para vivir una noche mágica. La lluvia ligera no fue impedimento; los seguidores de Enjambre, uniformados con suvenires como playeras, tazas y sudaderas, llenaron de energía y entusiasmo el lugar.
La espera se hacía sentir, y el público impaciente coreaba "¡Enjambre! ¡Enjambre!" mientras el escenario se preparaba para una presentación que prometía una noche sin igual para las y los asistentes.
Poco después de las 10:00 de la noche, el vocalista Luis Alberto Navejas tomó el micrófono para dar inicio al show. "Gracias Silao por recibirnos esta noche, gracias por aguantar y estar aquí presentes. Vamos a divertirnos, hay gente de todo el estado de nuestro querido Guanajuato, nuevamente gracias", expresó Navejas como mensaje de bienvenida.
Con su inconfundible estilo y energía eléctrica, Enjambre arrancó con el tema ‘Tras la puerta’, la cual desde los primeros acordes encendieron al público, que respondió con aplausos y gritos. La atmósfera se cargó de emoción, y las primeras filas se convirtieron en un mar de manos levantadas y celulares grabando cada momento. La banda, conformada por Luis Alberto Navejas en la voz, Julián Navejas en el teclado, Rafael Navejas en el bajo, Ángel Sánchez en la batería y Javier Mejía en la guitarra, demostró una vez más su habilidad para conectar con la audiencia.
La noche avanzó con un setlist cuidadosamente seleccionado. Temas emblemáticos como ‘Dulce soledad’ hicieron que los románticos cantaran a todo pulmón, mientras que otros éxitos como ‘El vacío’, ‘Hematófago’ y ‘Enemigo’ mantuvieron la energía en su punto máximo.
La conexión emocional entre Enjambre y su público quedó de manifiesto con la interpretación de ‘Siempre tú’, una balada que llevó a los enamorados a abrazarse y cantar juntos. En contraste, canciones como ‘Relámpago’ que hicieron que los asistentes no dejaran de bailar.
La energía no decayó en ningún momento, y la banda mantuvo al público en el filo de la emoción hasta el último acorde.
Al finalizar la noche, el agradecimiento de la banda fue sincero y emotivo. "Nos llevamos su energía y cariño, esto es algo que nos motiva a seguir creando música", concluyó Luis Alberto Navejas.