El inicio de la cuesta de enero provocó una disminución de hasta un 20% en las ventas de carnes de cerdo y res en la ciudad, luego de haberse mejorado en las fechas de festejos navideños y de fin de año.

El presidente de la Unión de Tablajeros e Introductores de Ganado, Juan Octavio Ruiz Arroyo, informó que en la última jornada semanal de sacrificio en el Rastro Municipal, todavía el año pasado se sacrificaron 190 cerdos y 20 reses, lo que significa que en las semanas subsecuentes durante los primeros meses del año disminuirá sensiblemente.

Manifestó el dirigente que en las vísperas de Navidad y de Año Nuevo la venta de productos cárnicos se incrementó hasta en un 30%. “Las ventas en estas fechas fueron buenas. Estuvieron bien, aunque no como en otros años”.

Con el inicio del año y la llamada cuesta de enero, agregó, se empezó a sentir la baja en el consumo del producto, ya que la mayoría de las familias deben hacer gastos emergentes como el cubrir predial, agua y deudas que se generaron por el gasto de los festejos de diciembre.

Al bajar el consumo, la matanza se disminuye también pasado de 190 a 170 y de 20 reses a 16 y aunque todavía no se tiene el reporte de esta semana que terminó seguramente se impactará en un 20%, disminuyendo nuevamente el porcentaje que ya se había recuperado.

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Informó que luego de estar al 100% a principios de enero del año cayeron las ventas un 20%, recuperándose a mediados de noviembre y diciembre, sin embargo debido a la pandemia por Covid-19 se sintió una nueva crisis en la venta.

Finalizó al decir que mientras no se tenga una solución a la contingencia sanitaria y se recupere la economía, las ventas en este sector permanecerán bajas en todo lo que resta del año, con algunos picos de mejoría en fechas de festejos como el día de las madres y otros.