David Pérez Alvarado, presidente de la Asociación Ganadera en Salamanca, señaló la participación en programas gubernamentales y estabilidad de los precios de productos cárnicos, se encuentran en riesgo; luego de que el gobierno municipal hiciera a un lado a las asociaciones e introductores de ganado en la conformación del Consejo Municipal de Desarrollo Rural Sustentable.
Al respecto, David Pérez Alvarado explicó que desde hace 12 años no se ha tenido en cuenta la Ley Federal de Desarrollo Rural Sustentable, en la cual se contempla la planeación, organización, industrialización y comercialización de la producción pecuaria y de porcicultores, para reducir la vulnerabilidad del sector y mejorar las condiciones de vida de la población rural.
“A esta ley, las últimas cuatro administraciones no le han puesto atención (…); el Consejo Municipal de Desarrollo Rural Sustentable se ha integrado por puro protocolo, sin darle importancia a las organizaciones productivas, ante ello el panorama para el productor es completamente incierto al trabajar cada quien por su lado”, detalló.
En este sentido, el presidente de la Asociación Ganadera en Salamanca mencionó que la actual administración no ha tenido ningún acercamiento para el desarrollo de proyectos o programas que beneficien la economía de los productores y familias salmantinas.
“A la asociación ganadera no se tomó en cuenta para conformar el Consejo, a pesar de que estamos a un lado del rastro municipal; lo que afecta el desarrollo de actividades productivas y la economía en general; cada quien va trabajar por su lado, el municipio, el gobierno estatal y las asociaciones ganaderas, con programas que al final de cada administración desaparecen por la falta de resultados y seguimiento”, agregó.
Ante ello, Pérez Alvarado señaló que esta situación ha orillado a desaparecer a productores en potencia en Salamanca; “además de que afecta en la inestabilidad de los precios, han desparecido la mayoría de grande productores ya que el 97 por ciento son productores de traspatio”, concluyó.