Desde hace más de 32 años, Doña Rosa, celebra a San Judas Tadeo luego de que este santo intercediera para que pudiera comprar su casa y años más tarde le salvara la vida.
“Hace 32 años yo no tenía casa, andaba de aquí para allá, una comadre me dijo `pídale a San Judas es bien milagroso´ y le dije, ayúdame a pedirle para que entre las dos nos haga caso. Pasa el tiempo y un día llega mi esposo y me dice que le habían autorizado la casa, fuimos a firmar y nos dicen que la casa nos había tocado en la Rinconada San Judas Tadeo” explicó.
Luego de esta divina coincidencia, otras dificultad llegó a la vida de doña Rosa, pues tuvo un problema con los pagos de la casa y le notificaron que se la quitarían. Entonces, decidió escribirle una carta al entonces presidente Ernesto Zedillo, esto pese a los comentarios de sus allegados quienes les aseguraban que las cartas las tiraban sin ser leídas.
“Yo con toda mi fe, mande mi carta y para un 28 de Octubre me llega la resolución que me presentara en las oficinas de Infonavit por que iba venir un delegado de León a ver mi caso, esta persona viene, nos atiende y me dice `a que santo te encomendaste mujer que ahora te van hacer un descuento y con facilidades´, le dije, a San judas Tadeo y me responde, te agarraste al mero jefe” dijo.
Luego de estas coincidencias divinas que incrementaron la fe de Doña Rosa, ocurrió otro suceso inesperado; “Me embarace, y tuve problemas de preeclamsia estuve muy grave en terapia intensiva y yo en mi inconsciencia le pedía a San Juditas y aquí en la colonia todos se juntaban a hacerle oración diario. Milagrosamente desperté del coma, yo lo veía en las gotitas del suero, recuerdo que las enfermeras me decían que estaba loca”.
Pese a los diagnósticos adversos, Rosa logró salir adelante de su padecimiento, recuperando su salud sin ninguna secuela. Otro hecho curioso ocurrió cuando una de las hijas de Rosa nació también un 28 de octubre.
Desde entonces celebrar a San Judas Tadeo se ha vuelto en una tradición adoptada por toda la colonia Rinconada San Pedro, pues su celebración ha sido motivo de unión y colaboración entre ellos.