Chocomilk de fresa, una de las tradiciones del Tomasa Esteves en Salamanca

En la central de abasto se encuentran expendios que han deleitado el paladar de los salmantinos por más de cinco décadas

Oswaldo Durán / El Sol de Salamanca

  · lunes 11 de noviembre de 2024

Los chocomiles se han vuelto parte importante de la alimentación de los salmantinos / Fotos: Oswaldo Durán / El Sol de Salamanca

El chocomilk es una de las bebidas más arraigadas en la alimentación del día a día de los salmantinos, sabores como chocolate, café, vainilla e incluso coco son algunos de los que se pueden encontrar en el mercado Tomasa Esteves, pero sin duda, el de fresa es el preferido de los consumidores desde hace ya varias generaciones.

Ubicados al interior de la central de abasto, cerca del área de comidas, se pueden encontrar alrededor de ocho establecimientos que han sido testigos del crecimiento del mercado desde la primera mitad de la década de 1972, cuando la mayoría de ellos iniciaron la venta de este producto que forma parte de la dieta diaria de los salmantinos, además de los tradicionales jugos de fruta de temporada, zapote, naranja, piña, zanahoria, betabel, mango, mandarina, entre otros.

Uno de estos establecimientos, es una herencia directa del antiguo mercado Hidalgo, situado en lo que hoy es la plaza cívica que conserva el nombre del padre se la patria, ahí Vicente Fonseca Aguilera, aprendió el negocio que inició su padre en 1958, por lo que antes de la construcción del Tomasa Esteves ya conocía el negocio, en el que diariamente se deleita el paladar de sus clientes desde hace 52 años.

La base de los chocomiles y licuados son leche pasteurizada, (ya que hasta hace dos décadas se utilizaba leche bronca), y azúcar, a la que se agrega el zumo de fresa o de otra fruta de temporada que gusten los clientes.

"De pequeño cuando mi mamá nos traía al mandado nos compraba nuestro chocomilk de fresa, ella se tomaba un jugo de naranja con tres huevos de codorniz y ese era nuestro desayuno, ahora cuando me tocó venir al mercado me gusta venir por mi chocomilk, ya que me acuerdo de cuando venía con mi mamá y mis hermanos", compartió Carlos Diosdado consumidor.

Por su sabor y calidad, los chocomiles del Tomasa Esteves son buscados por pequeños y grandes, ya que tienen ese toque de nostalgia de este lugar con mucha tradición e historia.

"En muchos lados puedes encontrar chocomiles, pero les aseguro que ningunos como los del mercado, además de buenos, espumosos y bien servidos, yo les diría a quienes vienen al mandado pasen por uno que luego van a regresar", expresó Andrea Martínez ama de casa.