Los integrantes de la Asociación de Productores de Cebada de Guanajuato, se declararon frenados en cuanto a la comercialización del grano con las empresas y pidieron a todos los cebaderos no celebrar contratos de comercialización sin antes fijar precios ya que se ha iniciado la propuesta de comprar en 4 mil 758 pesos la tonelada, cuando los productores están fijando el precio en 6 mil 095 pesos tonelada.
En conferencia de prensa, los dirigentes de la organización, representantes de varios municipios de la entidad expusieron en voz de Agustín Robles Montenegro como presidente, que no habrán de acercarse a negociar la cebada por debajo de los precios que como es sabido se fijan en base a los costos que se aplica en el trigo y que para el ciclo agrícola iniciado, se habla de 5 mil 790 pesos por tonelada, de tal manera que para la cebada el precio tendría que están firme entre un 12 y un 15 por ciento mas que el trigo.
Resalto que en los municipios de Cortazar, Jaral, Valle, Salamanca e Irapuato, es donde se produce la mayor cifra de cebada maltera y de reproducción del estado y de otros estados más, además de la calidad óptima que se produce , es por ese motivo que la industria tiene fijos los ojos en la comercialización del grano que se produce en estos lugares.
Tanto Robles Montenegro, como Héctor Ortega Razo, Secretario de Comercialización de Cosechas y el presidente del Comité Municipal Campesino en Salamanca, Samuel Balderas, explicaron que en la región se producen alrededor de 350 mil toneladas de cebada por ciclo y dada la calidad es comprada en un 99 por ciento por la industria cervecera, la cual en este momento estará seguramente tratando de asegurar contratos con valores económicos por debajo de las medidas que ellos ya tienen previstas.
En ese entendido hicieron un llamado a los productores de cebada para que se detengan en este momento y no firmen contratos porque aun son vulnerables los precios del grano, de tal manera que pronto estarán lanzando un llamado por cada municipio, a fin de que se esperen a negociar en conjunto los precios reales y no celebren contratos desfavorables a los productores.