Los recientes cambios de temperatura y el contacto con el humo del cigarro o productos que se están quemando son factores que pueden provocar irritación en las vías respiratorias y desencadenar cuadros virales y bacteriológicos que derivan en padecimientos como resfriados comunes o bronquitis que suelen afectar a los menores de 5 años y mayores de 60, sin embargo, al producirse en menor cantidad, no requieren de antibiótico y con ello, evitar la automedicación, así lo manifestó, Jorge Núñez López , presidente del Colegio de Médicos de Salamanca, quien además recomendó a la población en general, ingerir una gran cantidad de líquidos y productos ricos en vitamina C.
La mayoría de estas infecciones son de vías respiratorias altas, como la gripe común y la faringitis, aunque también se esperan casos de infecciones más graves como neumonía y bronquitis, aunque en menor proporción. "Estamos próximos a la temporada de frío, y esperamos que los grupos más vulnerables sean los primeros en vacunarse contra la influenza, ya que es la que puede causar más complicaciones graves en estas edades", mencionó.
Núñez destacó que el 80% de las infecciones respiratorias son virales, mientras que solo el 20% son bacterianas, por lo que hizo un llamado a evitar la automedicación, especialmente con antibióticos. "Es común que cuando alguien tiene molestias en la garganta recurra a un antibiótico, pero en la mayoría de los casos no es necesario. Si los síntomas persisten por más de 24 horas, lo recomendable es acudir al médico para un diagnóstico adecuado", advirtió.
Entre las recomendaciones para prevenir estas enfermedades, Núñez sugirió mantener una adecuada hidratación, ya que en épocas frías las personas tienden a beber menos líquidos, así como evitar los líquidos fríos y optar por tibios o calientes.
Asimismo, pidió consumir frutas ricas en vitamina C, como naranjas, mandarinas y ciruelas, que pueden ayudar a reforzar el sistema inmunológico, y evitar el contacto con humo, ya sea de cigarrillos o de la quema de residuos, ya que se trata de un elemento que suele irritar las vías respiratorias, lo que puede aumentar el riesgo de infección.
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Aunque Salamanca es una ciudad industrial, el presidente del Colegio de Médicos aclaró que las enfermedades respiratorias no están directamente relacionadas con la contaminación local, salvo en pacientes con alergias o asma, quienes podrían experimentar un agravamiento de sus síntomas