/ miércoles 14 de septiembre de 2022

Depresión y ansiedad: problemas que afectaron a salmantinos en pandemia

Ampliaron brigadas de atención para abarcar una mayor cantidad de pacientes

La pandemia fue un factor que generó que los trabajadores de la salud mental, modificarán los mecanismos para la atención de los pacientes que sufren depresión y ansiedad, enfermedades que tuvieron un aumento significativo durante la emergencia sanitaria, lo que generó que las tecnologías se volvieran su mayor arma para brindar consultas, informó, Nayelli Navarro, psicóloga clínica de la Jurisdicción Sanitaria V.


La psicóloga, destacó que la salud mental fue la más afectada por la pandemia, ya que durante ese periodo se agravaron los problemas de salud mental, principalmente en personas que ya los padecían, pues algunas de estas se llegaron a enfrentar a la pérdida por la covid-19, como por ejemplo, el duelo por un ser querido, el trabajo o el encierro, lo que volvió a un más necesaria la atención psicológica.

En el caso de Salamanca, durante el periodo de confinamiento se observó una mayor necesidad de salud mental sobre todo en materia de depresión y ansiedad, se detectó un número de casos y se tuvieron que recurrir a cuestiones novedosas no solamente en la atención psicológica, sino también de manera rutinaria en la población como lo fueron las consultas vía telefónica y virtual para llegar a la población, sin necesidad de que las atenciones fueran presenciales.

“Las atenciones incrementaron muchísimo no todo nuestro personal estaba en la posibilidad de de brindar ese tipo de atenciones donde no toda la población o buena parte de la población tenía acceso a los medios digitales, así que para tener una consulta tuvieron que ir y desplazarse a diversas lugares para brindar la atención y acercar a un mayor número de personas este tipo de servicios”, explicó.

Este tipo de actividades también permitió que se atendieran otros sectores de la población, como los estudiantes y adolescentes que tuvieron que dejar de ir a clases y que eso los llevó a tener crisis de depresión en grupos de 10 a 19 años y en los jóvenes de 20 a 24 años, a los que se brindó un mayor servicio mediante estos mecanismos.

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Para subsanar este tipo de problemas de salud mental, se recomendó a los pacientes, estrechar el vínculo con sus familiares.

La pandemia fue un factor que generó que los trabajadores de la salud mental, modificarán los mecanismos para la atención de los pacientes que sufren depresión y ansiedad, enfermedades que tuvieron un aumento significativo durante la emergencia sanitaria, lo que generó que las tecnologías se volvieran su mayor arma para brindar consultas, informó, Nayelli Navarro, psicóloga clínica de la Jurisdicción Sanitaria V.


La psicóloga, destacó que la salud mental fue la más afectada por la pandemia, ya que durante ese periodo se agravaron los problemas de salud mental, principalmente en personas que ya los padecían, pues algunas de estas se llegaron a enfrentar a la pérdida por la covid-19, como por ejemplo, el duelo por un ser querido, el trabajo o el encierro, lo que volvió a un más necesaria la atención psicológica.

En el caso de Salamanca, durante el periodo de confinamiento se observó una mayor necesidad de salud mental sobre todo en materia de depresión y ansiedad, se detectó un número de casos y se tuvieron que recurrir a cuestiones novedosas no solamente en la atención psicológica, sino también de manera rutinaria en la población como lo fueron las consultas vía telefónica y virtual para llegar a la población, sin necesidad de que las atenciones fueran presenciales.

“Las atenciones incrementaron muchísimo no todo nuestro personal estaba en la posibilidad de de brindar ese tipo de atenciones donde no toda la población o buena parte de la población tenía acceso a los medios digitales, así que para tener una consulta tuvieron que ir y desplazarse a diversas lugares para brindar la atención y acercar a un mayor número de personas este tipo de servicios”, explicó.

Este tipo de actividades también permitió que se atendieran otros sectores de la población, como los estudiantes y adolescentes que tuvieron que dejar de ir a clases y que eso los llevó a tener crisis de depresión en grupos de 10 a 19 años y en los jóvenes de 20 a 24 años, a los que se brindó un mayor servicio mediante estos mecanismos.

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Para subsanar este tipo de problemas de salud mental, se recomendó a los pacientes, estrechar el vínculo con sus familiares.

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