Desde hace 20 años, J. Francisco García Duran y María Soledad Rodríguez Tavares se han dedicado a endulzar la pupila de sus vecinos y personas que circulan por la Avenida Cazadora con los adornos temáticos que instalan en su casa durante cada temporada del año.

No importa la temporada, para esta pareja de esposos siempre existe la oportunidad de adornar, su motivación más grande radica en los elogios de la gente que se queda admirada con el trabajo que realizan.

Todo comenzó con don Francisco, cuando trató de darle a su hija un cumpleaños totalmente diferente a los demás.

“Mi hija cumple años el primero de noviembre, entonces para festejarle empecé a hacer adornos alusivos a Halloween, primero fueron cajas de muerto y candelabros en la calle (…); desde que mi esposa y yo nos casamos iniciamos a realizar todo esto primero cada año y después cada temporada”, dijo.

15 de septiembre, Navidad, Halloween, Día de Muertos, primavera, 10 de mayo, Día del Padre y 14 de febrero, no existe temporada que no sea plasmada en cada rincón de su hogar, en el que cada año se agrega un detalle diferente.

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“Nuestros vecinos nos motivan y nos levantan el ánimo para hacerlo, para Halloween ponemos una bruja en la parte alta de la casa. (…) Muchas personas ubican la casa por estos detalles, es un trabajo en conjunto donde mi esposo me dirige y yo a él”, explicó María Soledad Rodríguez Tavares.

En medio de la pandemia, esta actividad se ha convertido en una oportunidad de convivencia entre la pareja, pero sobre todo se ha transformado en un aliciente para sus vecinos y personas que en más de una ocasión han sonreído cada vez que ven esa casa adornada acorde a la temporada.