Habitantes del conjunto habitacional Arboledas de Ciudad Bajío, se dijeron artos de la inseguridad que sufren, ya que los asaltos a mano armada y robos a casa habitación continúan registrándose al menos una vez por semana, por lo que exigen a los fraccionadores tomar cartas en el asunto debido a que dentro de las cuotas de mantenimiento que pagan cada mes se contempla el servicio de seguridad, vigilancia y accesos controlados.
A pesar de los filtros de seguridad, el pasado martes 29 de noviembre un vecino de este fraccionamiento fue despojado de su vehículo en la puerta de su casa, por dos hombres que arribaron al lugar y lo amagaron con un arma de fuego, para después huir a bordo de su automóvil con rumbo desconocido, situación que fue registrada por sus propias cámaras de seguridad y se han difundido a través de redes sociales.
“No es posible que si hay un control de acceso puedan entrar a robar ya sea aquí en el residencial o en el fraccionamiento, se supone que estamos pagando un servicio y no nos lo están dando como debe ser”, argumentó Sandra Diosdado.
Así mismo, los vecinos indicaron que la mayor problemática radica principalmente los fines de semana, que si bien algunos reciben visitas de familiares, durante la madrugada entran y salen vehículos desconocidos a una tienda de conveniencia comprar bebidas alcohólicas, lo que consideraron es el principal problema.
“Hay una tienda que vende alcohol hasta las doce de la noche y por eso entra mucha gente de fuera, en otros lados cierran a las 10 y acá vienen porque saben que pueden encontrar cervezas, lo malo es que no todos lo que entran son buenas personas o sólo vienen a comprar cerveza, mucha gente que anda robando casas nadamas entran para ver cómo está el asunto aquí y después regresar a robar”, refirió María Elena Robles.
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En este sentido los residentes cuestionaron la eficacia de las casetas y filtros de acceso que existen, ya que para el ingreso a cualquier clúster, los visitantes e incluso vecinos deben acceder por dos casetas, por lo que los habitantes de ambos conjuntos habitacionales piden se refuerce la seguridad de parte de los fraccionadores, ya que de continuar los robos tomaran medidas como dejar de pagar el mantenimiento hasta que se brinde el servicio que se ofrece de manera adecuada.