Irapuato, Gto; Con el proyecto de descentralizar las dependencias federales propuesto por el virtual presidente electo de la República Andrés Manuel López Obrador, a partir de diciembre próximo la Secretaría del Trabajo y Previsión Social tendrá su sede en la ciudad de León, Guanajuato.
Con esta medida, si la futura Secretaría del Trabajo y Previsión Social mantiene a la actual nómina que posee, a Guanajuato estarían llegando unos 256 funcionarios federales para laborar en esta dependencia federal.
Ismael Plascencia Núñez, presidente de la Cámara Nacional de Vivienda (Canadevi) en Guanajuato, dijo que si este cambio se hace “de trancazo”, generaría un problema tanto para conseguir vivienda para esos 256 funcionarios federales, incluidos en ellos a la próxima titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde Luján, como también para conseguir oficinas, ya sea rentadas o compradas, con lo cual se traduciría en una fuerte inversión que impactaría en el erario federal.
“Creemos que esta descentralización debe ser mejor analizada, pus si se hace de trancazo, será un auténtico desmadre, pues significará mover a familias completas, si es que se respeta también la antigüedad de los trabajadores de base que se dijo se mantendrán, pero vemos que la demanda de vivienda aumentará no sólo en León, sino en municipios como Guanajuato, Silao, Irapuato e incluso hasta Salamanca y Celaya, donde tenemos déficit de vivienda”, dijo el titular de la Canadevi en Guanajuato.
De acuerdo con Javier Contreras Ramírez, delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, en Guanajuato hay un déficit de 70 mil unidades de vivienda social.
A nivel nacional, según la Comisión Nacional de Vivienda, durante 2017 fueron adjudicadas 443 mil viviendas en el país, contra los 517 mil inmuebles adjudicados en 2016; es decir, una disminución de 14.2%.
Sería costoso: Márquez Márquez
Pero la complicación de cambiar dependencias federales a los estados no sólo es referente a la vivienda, sino también a encontrar inmuebles para oficinas que alberguen a esos posibles 256 funcionarios federales que llegarían a Guanajuato.
Miguel Márquez Márquez, gobernador de Guanajuato, dijo que esta descentralización sería costosa porque no hay infraestructura en todo el país para albergar dependencias federales.
“En Guanajuato tomamos otra medida, teníamos las dependencias regadas en oficinas rentadas o propias y por eso construimos los Centros de Gobierno, para que en un mismo lugar estén las dependencias y el ciudadano se evite la molestia de dar dos, tres vueltas a lugares que están distanciados.
“En principio la idea es buena, para dar ese incentivo económico a otras entidades, pero se tiene que empezar por tener infraestructura y no la hay; se busca descentralizar de la Ciudad de México, pero hacerlo de un jalón no va a ser fácil, a nosotros cambiarnos a oficinas nuestras nos costó seis años y además está el problema de los sindicalizados, muchos van a tener que viajar con sus familias, sus hijos, dejar su estilo de vida y si se la pasan viajando, va a ser muy caro para ellos”.
Dos centenas de burócratas a Guanajuato
De acuerdo con un recuento hecho por Organización Editorial Mexicana a partir de la estructura orgánica operativa disponible en el Portal de Obligaciones de Transparencia, actualmente la Secretaría del Trabajo y Previsión Social la conforman 256 personas, entre el titular de la dependencia, los subsecretarios, directores, asistentes y hasta chóferes, eso sin contar a la oficina del Titular de la Unidad de Delegaciones Federales del Trabajo, que tendería a desaparecer con la eliminación de dichas delegaciones federales.
Con esta medida anunciada por Andrés Manuel López Obrador de trasladar a Guanajuato la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, esas 256 personas se estarían trasladando a territorio guanajuatense.
A esto habría que sumarse personal sindicalizado y de intendencia que no están dentro de la estructura orgánica operativa, de la cual no se ha dicho si será reducida en cuanto entre en funciones el próximo gobierno federal.
Por ejemplo, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, actualmente encabezada por Roberto Campa Cifrián, la componen tres subsecretarías: la Subsecretaría de Empleo y Productividad Laboral, en la que hay 20 trabajadores, incluyendo al propios subsecretario, Fernando Alfredo Maldonado Flores.
Está también la Subsecretaría de Previsión Social, donde laboran otros 20 empleados, incluido el propio subsecretario David Arellano Cuan.
La otra Subsecretaría es la del Trabajo, donde laboran 46 personas, incluido Carlos Augusto Siqueiros Moncayo, quien es funge como titular de esa subsecretaría.
Las áreas de la actual Secretaría del Trabajo y Previsión Social que más trabajadores tienen son la Dirección General de Asuntos Jurídicos, con 37 trabajadores, incluido el titular del área; la oficina del Titular del Órgano Interno de Control con dependencia jerárquica y funcional de la secretaría de la Función Pública, con 32 trabajadores, así como la Oficialía Mayor, con 24 personas que laboran en ella.
Aún no ha sido anunciado si las dependencias federales sufrirían recortes y en caso de que quedaran con el personal que actualmente tienen, más de dos centenas de burócratas estarían llegando a Guanajuato en los próximo meses.
A diferencia de otras dependencias, cuyos próximos titulares han estado acudiendo a los estados donde habrán de asentarse, como Rocío Nahle, próxima secretaria de Energía, quien recorrió Tabasco para analizar terrenos para la próxima refinería anunciada por López Obrador para su construcción, o bien Román Meyer Falcón, próximo titular de la Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, quien estuvo en Hidalgo para analizar los edificios que albergan dependencias federales, para ver cuáles le serían funcionales para mudar la secretaría que estará a su cargo, las autoridades estatales aún no tienen datos de visitas para analizar las instalaciones federales y un posible adecuamiento de las mismas para cambiar a León a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.