De cada 5 accidentes viales 10 son en motocicletas, las cuales, regularmente son conducidas por gente menor de 30 años, veces por menores de 20 años y en otras ocasiones por menores de edad y la mayoría de ellos lo hacen sin utilizar adecuadamente su equipo de protección, dicha acciones han obligado a intensificar los operativos viales, para reducir la accidentabilidad, informó, Daniel Pérez Sequera, director de Tránsito, Movilidad y Transporte.

En ese sentido, el funcionario municipal, admitió que en la mayoría de accidentes que se producen en el municipio, se involucran de manera directa a los jóvenes, muchas veces producidos por la falta de conciencia vial, el uso del celular o distractores, es por ello, que a través del área de Educación Vial, se han llevado a cabo simulacros de accidentes a empresas y escuelas, para concientizar a los jóvenes y empleados sobre la importancia de utilizar los dispositivos de protección.

“Ya las hemos realizado al interior de escuelas como la UTS y Cetis dónde fueron muy bien recibidos, las estamos ofreciendo a las escuelas de acuerdo a nuestras posibilidades porque muchos de los alumnos llegan en moto y es importante concientizarlos sobre el uso de dispositivos para su protección”, explicó.

Destacó que, el mes como mayor de accidentabilidad fue junio, desde entonces a la fecha esta incidencia ha disminuido considerablemente y esto se debe a los operativos viales que se han efectuado a lo largo y ancho del municipio de Salamanca, en donde mediante la infracción se busca impulsar el uso de casco entre los jóvenes de manera regular.

“Al principio de la administración se observaban de dos a tres motociclistas que utilizaban su casco, ahorita el promedio ha incrementado a 5 lo que significa que hay un avance paulatino en la conciencia de la ciudadanía, a pesar de ello la conducción de motos en las vialidades es un problema que sigue vigente no solamente en este municipio sino en todas las ciudades”, indicó.

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A pesar de los operativos, aseguró que solamente se han mantenido cifras a la baja en la accidentabilidad, pero no se ha logrado llegar a cero, debido a que Salamanca es una ciudad con bastante movimiento vehicular, lo que impiden que se generen derrapes o colisiones.