La historia del mercado municipal más visitado y grande de Salamanca inicia básicamente desde los primeros pobladores del lugar de tepetate o Xidoo en Otomí; durante años la central de abasto que hoy en día todos conocen no se ubicó entre la Avenida del Trabajo y Abasolo, por décadas el comercio se instaló frente a San Agustín, por ello, la plaza cívica heredó su nombre Miguel Hidalgo, para luego un 15 de noviembre de 1972 ser inaugurado como Tomasa Esteves.
De acuerdo a una fotografía que data del año 1920 se puede observar la calle Zaragoza donde el comercio se realizaba justo en la esquina con la calle Juárez, hay que destacar que desde el siglo XVII Salamanca fue punto medular para el paso de personas o bien cargamentos de aquellos que venían de la ciudad de México y que se dirigían a León o Guanajuato e inclusive Guadalajara.
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Al hacer una parada en este municipio, en aquellos tiempos para poder descansar, se inició con el comercio en esas calles que casualmente colindan con la plazoleta Miguel Hidalgo, hoy en día el espacio es utilizado para la realización de eventos o bien actos cívicos.
De acuerdo a historias de personas adultas, el comercio se inició de esta manera, para lograr ser lo que hoy conocemos como el mercado, poco a poco el mercado fue creciendo al igual que la población. Los pobladores intercambiaban comida por artículos de valor que los foráneos traían consigo, en ese tiempo México se modernizaba, Salamanca tuvo un gran avance en materia de transportes pues era importante escala en el Ferrocarril Central Mexicano, sin embargo no tuvo la suerte como Guanajuato capital o Salvatierra en donde se construyeron mercados, obras de estilo francés de la época con motivo del los festejos del Centenario.
En ese tiempo el municipio reflejaba un aumento de habitantes ya que superaba los 10 mil, por lo tanto había una necesidad de concentrar en un espacio el comercio de artículos de primera necesidad, alimentos y demás.
Para el año de 1942 se mandó construir el mercado municipal en lo que era el jardín de San Agustín y la calle Juárez, en ese entonces el mercado municipal se levantó en la mitad norte de lo que hoy día es la Explanada Miguel Hidalgo. Al año siguiente y después de haber hecho una inversión de cerca de 123 mil pesos, fue inaugurado y albergaba cerca de 30 locales exteriores para comercios mayores, además de las mesas interiores donde se colocaban los comerciantes menores, principalmente de productos alimenticios.
Treinta años después
Después de que se inauguró el mercado en la plazoleta Hidalgo, tres décadas después el 15 de noviembre de 1972 fue puesto en servicio el mercado Tomasa Esteves que hoy conocemos, por el presidente municipal José Francisco Aguinaco Alemán.
En aquel entonces se inauguraron más de 100 locales con 50 puestos de verduras; 257 puestos semifijos y 52 locales, para este año la población aumentó de 10 a 30 mil habitantes, por lo que en 1982 se abrió un nuevo mercado en la colonia Guanajuato, el llamado Barahona.
En la actualidad
Actualmente el mercado más grande del municipio, resguarda a cientos de comerciantes, recibe a diario a miles de compradores. Las calles en rededor del mercado se han vuelo el sitio ideal del comercio, tanto el establecido como el ambulante, comentan las personas mayores que en otros años el comercio sí respetaban las banquetas y accesos, costumbres que aseguran se han ido perdiendo para ver quien tiene o gana más lugar en el mercado municipal.