El comandante de la 16/a. Zona Militar, Enrique García Jaramillo, aseguró que el país cuenta con fuerzas armadas fuertes, leales, renovadas y capaces para con ello garantizar la soberanía, la seguridad y la independencia del país.
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Esto, durante la conmemoración del aniversario número 110 de la creación del Ejército Mexicano, realizada en las instalaciones de la XII Región Militar.
Ante autoridades estatales y municipales, pues había alcaldesas y alcaldes de algunos de los municipios de la entidad, Enrique García Jaramillo dijo que el Ejército Mexicano ha pasado por varios procesos de evolución, en donde cada administración federal le ha imprimido su toque, pero el espíritu de servicio del personal militar no ha cambiado, pues el bien común y garantizar el Estado de Derecho son parte de la ideología con que se cuenta en las fuerzas armadas.
“Debemos vivir el presente, sin olvidar las grandes lecciones del pasado, sin olvidar el legado de valientes compatriotas que antes y ahora lucharon por darnos un país libre y soberano; emulando ese legado, ustedes dan cuenta de su entrega, lealtad y firme vocación de servicio; otros, en cuyos cuerpos perduran las heridas que los incapacitaron permanentemente, han dado ejemplo de nobleza y valor y algunos más cumplieron su deber y han ofrendado la vida por la sociedad, su ejemplo de entrega y servicio deben ser motivación para que todos los días intensifiquemos los esfuerzos en la búsqueda del bien común y el progreso de México; todos, absolutamente todos ellos, son los héroes del presente y que se premie su heroísmo”, dijo el comandante de la 16/a Zona Militar.
Enrique García Jaramillo recordó que el Ejército Mexicano se gestó el 19 de febrero de 1913, luego de que Victoriano Huerta se asumiera como presidente de México, situación que el Congreso de Coahuila y el entonces gobernador de esa entidad, Venustiano Carranza, desconocieron esta situación y por ello armó un ejército que tuviera como misión el restituir el orden Constitucional.
Para 1914, el Ejército Constitucionalista fue reconocido en los Tratados de Teoloyucan, en donde se reconoció su triunfo ante el entonces ejército federal y varios de los integrantes de éste se unieron a las fuerzas de Carranza, que en 1917 fueron reconocidas como único Ejército Nacional, el cual en 1948 recibió el nombre de Ejército Mexicano; fue el presidente Miguel Alemán Valdés, quien decretó en 1950 que cada 19 de febrero se reconociera como el Día del Ejército Mexicano, para reconocer a las fuerzas armadas que lograron restituir el orden en los días más aciagos que vivía el país.