Guanajuato, Gto.- La Universidad de Guanajuato negó tajantemente que haya represalias en contra de estudiantes universitarios por los daños provocados en sus instalaciones en las manifestaciones registradas entre septiembre y octubre de 2023, cuando hubo la toma de algunos espacios por parte de jóvenes que buscaban manifestar su inconformidad.
A través de un comunicado, la Universidad de Guanajuato negó que haya una persecución en contra de estudiantes, pues explicó que derivado de los daños causados en el inmueble se trata de un proceso que se persigue por oficio, por lo que se tenía el deber legal de notificar a las autoridades con la finalidad de deslindar las responsabilidades.
Durante los meses de septiembre y octubre del año pasado, las instalaciones de la Rectoría General, y de otras áreas de la administración general de la Institución, fueron retenidas por un grupo de estudiantes quienes señalaban tener diversas demandas que finalmente se concretaron en un pliego petitorio que fue suscrito por las autoridades universitarias el día 2 de octubre de 2023, al cual se ha dado puntual seguimiento en un marco de irrestricto apego a la legalidad, considerando la planeación institucional, así como la disponibilidad de recursos.
“Como consecuencia de ello, las instalaciones referidas fueron entregadas a las instancias universitarias correspondientes bajo la exigencia del grupo de estudiantes de que nuestra Institución no tomara ningún tipo de represalias en su contra, lo cual, afirmamos categóricamente, no ha ocurrido: la Universidad de Guanajuato no ha realizado ninguna acción encaminada a reprimir o inhibir el ejercicio de derecho alguno”, se señala en el comunicado.
No obstante, la Universidad de Guanajuato también señaló que una vez recibidos los espacios universitarios retenidos, se encontró que existen múltiples daños al inmueble, así como a diversos bienes muebles de la Institución con importante valor institucional y social.
“Ante tal situación, como institución pública formadora de estudiantes, la Universidad tiene el deber legal de hacer del conocimiento de las autoridades competentes dichos daños con la finalidad de deslindar las responsabilidades correspondientes. Por ese motivo y tomando en consideración que algunos de los probables delitos cometidos son de persecución oficiosa, se iniciaron diversas carpetas de averiguación que actualmente se encuentran en conformación”.
La Universidad de Guanajuato justificó esta acción, al señalar que es obligación preservar el patrimonio histórico y cultural con que cuenta, pero para nada se trata de una persecución en contra de estudiantes.
“Nuestra Casa de Estudios es depositaria de un patrimonio histórico y cultural cuya riqueza constituye un valioso legado de gran relevancia para las actuales y futuras generaciones por su valor histórico, cultural y arquitectónico, pero además en virtud de que muchos de sus bienes constituyen un referente de identidad para la comunidad universitaria y para la sociedad. Por esa razón, como institución pública de educación, tenemos el deber de preservarlo y difundirlo”.