Los familiares de víctimas de desaparición continúan representando solo un número para las autoridades al no visibilizar y atender las necesidades madres, padres y hermanos que han perdido a un ser amado en medio de la violencia; acusó Alma Lilia Tapia vocera del colectivo Salamanca Unidos Buscando Desaparecidos, tras dar a conocer la falta de apoyo que padecen las madres buscadoras, por lo que solicitarán que en Salamanca se cree la Unidad de Atención a Víctimas.
“Es un ir y venir para quienes estamos en esta situación, no hay apoyo, sobre todo porque las autoridades se echan la bolita unas a otras, que el Municipio dice que le toca al Estado, el Estado a la Federación, luego que a los Municipios y la verdad llega un punto que no sabes que hacer o con quién dirigirte, la verdad eso desanima a las buscadoras, necesitamos que si cada quién haga su trabajo pero bien, no solo al ahí se va”, indicó.
Por ello, el próximo 26 de abril las madres buscadoras de Salamanca solicitarán a las autoridades de la Fiscalía General del Estado, la Comisión Estatal de Búsqueda y otras instancias se cree en Salamanca la Unidad de Atención a Víctimas, luego de que en este tema no ha habido avance en la localidad, a pesar de que hace más de dos años se firmó el convenio para la creación y operación de grupos de búsqueda de personas desaparecidas, lo que fue el parteaguas para crear la instancias en otros municipios, como Irapuato por ejemplo.
Se estima que en Guanajuato hay más de dos mil personas desaparecidas, de las cuales la mayoría son de los municipios del Corredor Industrial Celaya, Villagrán, Apaseo el grande, León, Irapuato y Salamanca. A pesar de ello, en la localidad no existe una cifra exacta, sin embargo, los colectivos de búsqueda albergan a 200 familias que están a la espera de saber sobre el paradero de sus familiares desaparecidos.
El colectivo Salamanca Unidos Buscando Desaparecidos, se conformó en noviembre del 2019, a casi cuatro años de haberse formado está integrado por 200 familias no solo de Salamanca, también de los municipios de Jaral del Progreso y Valle de Santiago.
Gran parte de sus resultados alcanzados, radica en las actividades que realizan las madres buscadoras como búsquedas en campo, difusión a fichas con los rostros de los desaparecidos, marchas, altares, recolección de regalos para los hijos de las personas desaparecidas y reuniones con la Fiscalía, así como apoyo psicológico para los integrantes del colectivo.