Ante la presentación de la nueva estrategia de seguridad de la gobernadora del estado de Guanajuato Libia Dennise García Muñoz Ledo, el presidente del Observatorio Nacional Ciudadano Francisco Rivas, destacó que esta cuenta con elementos que la ponen por delante incluso de algunas federales, sin embargo se debe someter a análisis en su implementación.
“Me parece que la estrategia que tiene planeado el gobierno de Guanajuato, tiene datos y elementos muy positivos, el simple hecho que se le quiera poner atención a la extorsión, a la desaparición de personas, a la violencia en contra de los comunicadores, me parece fenomenalmente positivo porque a nivel nacional no tenemos esto”.
Sin embargo, dijo que no es suficiente la presentación, pues deben evaluar el desempeño y resaltó que debe haber especial atención a que no caigan en duplicidad de funciones entre instancias.
“Hay que recordar que las Secretarías de Seguridad Pública tienen ciertas responsabilidades y las fiscalías tienen otras, lo importante es que sean complementarias y no entren en competencia entre ellas, que sirvan precisamente para eliminar el fenómeno delictivo, que no vayan nada más, por un caso en particular y nos lo presuman como un gran logro, sino que vayan por el fenómeno y generen las condiciones para que cada vez haya menos incentivos por ejemplo para extorsionar”.
Señaló que existe un gran reto, pues quienes se dedican a delinquir cuentan con capacidad de adaptación casi inmediata, por lo que deben ser contundentes en el combate y que delincuentes no “brinquen” de un delito a otro.
“Creo que la estrategia CONFÍA, tiene muy buenas bondades, lo importante es que esas bondades, se transformen en hechos contundentes, que el gobierno se siga manteniendo abierto a esta disposición de ser evaluado y como lo dijimos, nosotros no somos comparsas de nadie, estamos ahí para aportar lo que conocemos, pero también para criticar, nuestra ayuda también es criticar”.
Mencionó que en comparación por ejemplo con las cifras a nivel federal, existen cifras que bajaron, pero no atribuidas necesariamente a un combate efectivo, pues el sexenio pasado no logró atacar casi ningún delito, aseguró, explicó que datos como el de robo a vehículos tiene tendencias a la baja desde 1997 y está más bien asociado a dispositivos de las mismas unidades, otras bajas atienden a los temas de pandemia y aislamiento.
“El robo a casa-habitación, el robo a transeúnte bajaron y en parte las bajas fue porque durante la pandemia se desplomaron estos delitos, si no hubieran desplomado hubieran quedado ahí y de hecho, el robo a negocio, la diferencia entre el sexenio de Peña y el sexenio del expresidente López, en tasas permaneció invariado, si no hubiera habido la pandemia, también hubiera estado en el primer lugar histórico, la extorsión además creció casi un 50% a nivel federal.”
También hay casos como el de secuestro que expresaron bajó a nivel federal, pero existen datos que no están registrados como los secuestros de migrantes.