GUANAJUATO, Gto.- Sí tenemos un problema serio en el consumo de alcohol y tabaco entre los menores de edad en el estado, por lo que es necesario trabajar día a día junto con los padres de familia para evitar por todos los medios que esto ocurra, llamó el secretario de Salud de Guanajuato, Daniel Díaz Martínez durante la instalación del Comité Interinstitucional de la Secretaría de Transparencia y Rendición de Cuentas que se adhirió a la estrategia Planet Youth.
En el evento realizado en el auditorio general de la Universidad de Guanajuato, el funcionario estatal manifestó “conceptualmente no es un tema de lucha contra las drogas, nosotros no somos policías, somos parte de una familia, de una sociedad que queremos vivir mejor, tener un entorno más saludable, una sociedad más productiva y una mejor calidad de vida”.
Al dirigir el mensaje a las madres y padres de familia que laboran en la STyRC, y ante la presencia del titular, Carlos Martínez Bravo, el secretario de Salud dijo “el reto ahí está, se los dejamos a todas y todos ustedes, no dejemos todo en manos de mamá, los papás debemos involucrarnos lo más que podamos”.
En el evento también fue entregada una insignia de Planet Youth, la primera que hace la Secretaría de Salud a una dependencia estatal.
Díaz Martínez hizo referencia que se debe atender este problema de las adicciones, que mediante una encuesta realizada arrojó que el 56 por ciento a nivel estatal de los niños y niñas menores de edad consumen alcohol y un diez por ciento de los infantes fuman o que un cuatro por ciento consumen marihuana. Un 80 por ciento de los jóvenes del estado tienen factores protectores empezando por la familia.
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Dichos estudios desprenden que el incremento se dio precisamente luego de finalizar el confinamiento social provocado por la Covid-19. La otra pandemia son las adicciones, porque el consumo de sustancias aumentó en los adolescentes tras el confinamiento, esto significa que el haber estado en casa fue un factor protector importante, sostuvo.
Por ello, recalcó que se debe atender la situación porque las adicciones causan la deserción escolar y que tienen más posibilidades de unirse a un grupo delincuencial y se incrementa la violencia, o niñas que se embarazan en la escuela y puede evitarse la muerte o la discapacidad por accidentes automovilísticos que ocurren por consumo de alcohol.
Finalmente reiteró que más que necesitar abrir más anexos, es reducir el número de consumidores de este tipo de sustancias nocivas para la salud de los menores de edad. Debe haber una convivencia familiar, que se convierta en el principal factor protector para que los hijos no estén expuestos.