Después de más de dos décadas en que se creó el tiradero de lodos tóxicos ubicado en el Cerro de la Cruz , autoridades de los tres niveles de Gobierno dejaron inconclusas las acciones de remediación del sitio.
Al respecto, el director de Medio Ambiente Alberto de la Torre Gleason, explicó que el tiradero de lodos tóxicos es un tema que concierne a la federación, el cual se trató en la reunión que tuvieron recientemente con el delegado de la Semarnat en Guanajuato y la única información que les proporcionó es que la empresa Quidesa, evadió sus responsabilidades ambientales declarándose en quiebra.
“La empresa está en un proceso de quiebra y al tratarse de un asunto legal con el jurídico de Semarnat, tenemos que ver cómo articular esto y que no queden en el limbo (…) no tenemos conocimiento si a la fecha se siguen haciendo trabajos o cómo va quedar esto” dijo.
Explicó que en la reunión que tuvieron con el delegado de Semarnat le cuestionaron si existen las finanzas para que la empresa pueda solventar la falta de compromiso de la empresa, además señaló que este tema entrará dentro de la agenda Municipio, Federación y Estado que se irá dando en este año para que vaya fluyendo más información al respecto.
En el cerro de La Cruz se encuentran el tiradero toxico que la empresa Químicos y Derivados S.A. ocasionó; en el lugar aún existen más de 30 mil toneladas de lodos tóxicos a cielo abierto, de los cuales únicamente se retiró cerca del 10 por ciento esto, a pesar de que la empresa se comprometió a retirarlo desde el 2014.
Quidesa se dedicaba al elaboración de productos derivados del petróleo, estos tiraderos formaron lagunas de desechos que generan agua ácida que al evaporarse llega a la atmosfera y además contamina los mantos friáticos.
De acuerdo a ambientalistas, estos pasivos ambientales han generado la proliferación de enfermedades como conjuntivitis y cáncer en las personas que habitan en los alrededores, así como la contaminación del agua de la zona, provocando afecciones de la piel al hacer uso de ella.