Fray Antonio Téllez Martínez párroco del templo de San Agustín de Sahagún, confirmó que luego de dos años de haberse suspendido la procesión del silencio en salamanca, este 2022 se realizará la edición 54 de esta tradición que da fin al tiempo cuaresmal tras la semana santa.
En este sentido, la iglesia intenta rescatar la Procesión del Silencio como un instrumento educativo, catequístico y pedagógico para el pueblo; para que los salmantinos se sientan cernamos a los misterios de la salvación, pasión, muerte y resurrección de Cristo, en la Semana Santa directamente en los nueve pasos de la Procesión.
“A nosotros nos preocupaba que regresara este evento religioso-cultural, por el beneficio que se hace al pueblo en su educación y cultura comunitaria, ante la falte de este tipo de eventos, importante para educación de un pueblo en su espíritu y su fe”, refirió el párroco.
Ante ello, invito a niñas, niños, jóvenes y adultos a participar en esta 54 edición, la primera a realizarse tras el confinamiento social que generó la contingencia sanitaria en 2020, lo que obligó a suspender eventos multitudinarios, sin embargo, reitero que los asistentes deberán acatar el protocolo sanitario correspondiente, teniendo en cuenta el uso de cubrebocas y mantener la sana distancia.
La historia
Por su parte Juan José Rodríguez Chávez, cronista de la ciudad, recordó que la Procesión del Silencio fue retomada por el padre Fray Camilo Montes en 1966, “se dice que se realizaba en Salamanca desde el siglo XVII”. Actualmente la procesión del silencio en dicha ciudad es organizada por el patronato que se organiza en el templo de San Agustín.
Distintas cofradías y grupos católicos se encargan de las distintas representaciones de la Pasión y la Procesión del Silencio, denominadas; “El Ecce Uomo”, “El Señor de la Columna”, “El Señor del Perdón”, “El Santo Entierro” y “La Virgen de la Soledad”.
Usualmente esta tradición cuenta con una asistencia de por lo menos mil 500 fieles quienes forman parte de las cofradías que acompañan a las imágenes que rememoran la Pasión, Flagelación y Muerte en la Cruz, la noche del Viernes Santo.