Si bien la historia de la Independencia de México cuenta con la participación de miles hombres y mujeres que se unieron a la lucha por un país libre en contra de la esclavitud entre 1810 y 1821; Salamanca figura como una de las cunas más importantes de héroes nacionales, además de ser parte de la ruta de Independencia al haber acogido a Hidalgo en su andar hacia la capital al inicio del movimiento en 1810.
De acuerdo a los datos históricos que pueden constatarse en la que por dos noches fue casa del padre de la patria, hoy transformada en el museo Hidalgo en la intersección de las calles Albino García y Benito Juárez, en la zona centro de la ciudad; Miguel Hidalgo alentó a los salmantinos a unirse a la lucha por la independencia la mañana del 25 de septiembre de 1810, se estima que más de 25 mil se unieron a la lucha tan solo en Salamanca.
De estos miles de hombres y mujeres valientes, fueron cuatro personajes que tuvieron un papel trascendental en la historia; fueron Andrés Delgado “El Giro”, Albino García Ramos “El Manco”, María Tomasa Esteves y Salas, así como el padre Rafael Garcilita.
Los Insurgentes salmantinos por encomienda de Hidalgo fueron quienes lideraron el movimiento de independencia en todo el Bajío.
María Tomasa Esteves
Nació en la calle que hoy lleva su nombre, el 27 de febrero de 1778 y era proveniente de una familia de clase media. Por su belleza fue llamada Friné (mujer bella) mexicana; se conoce que su verdadera labor fue recabar información del ejército realista español e integrar el primer frente insurgente en Salamanca.
Luego de un combate ocurrido en la comunidad de Valtierrilla donde salió victoriosa, fue aprehendida durante su regreso a la Villa de Salamanca, por cuatro días esperó su sentencia y fue a través de Agustín de Iturbide que recibió la orden de ser fusilada. La sentencia se cumplió el 9 de agosto de 1814 en la esquina que forman las calles ahora nombradas como Andador Revolución y Río Lerma; para escarmiento de su sexo fue colocada su cabeza en la Plaza de Salamanca.
Andrés Delgado “El Giro”
Fue un hombre que tuvo valor, convicción, que sirvió y luchó por el pueblo para hacer valer los derechos de los mexicanos compañero de Francisco Javier Mina, en el memorable combate de “Hacienda la Caja”, donde “El Giro”, tomó parte con 150 hombres. Su centro de operaciones era Santa Cruz hoy de Juventino Rosas, lugar donde se refugiaba cuando era perseguido y se ocultaba en las numerosas cuevas del lugar y cuya entrada secreta solo él conocía.
En una de tantas luchas a pesar de que lo enfrentaban varios soldados, el Giro opuso tenaz resistencia, matando a tres e hiriendo a varios, hasta que abrumado por la fatiga y por el número de sus atacantes, sucumbió lapidado a manos de los soldados realistas, quienes lo decapitaron, el 3 de julio de 1819, por la mañana vecinos de Santa Cruz frente a la capilla de descubrieron el decapitado cuerpo, su cabeza fue colocada en la Plaza de Armas (hoy Jardín de la Constitución), para que sirviera de escarmiento.
Albino García Ramos “El Manco”
Considerado un personaje con mucha inteligencia e idealista, utilizó su nobleza para ponerse al servicio de la patria, aprendió de sus derrotas para potenciar sus estrategias de combate.
A pesar de tener un brazo lastimado que lo llevó a obtener el apoyo de “El Manco”, la gente de este municipio le rinde honor por contribuir a que actualmente tengamos un país libre y soberano.
Fue fusilado el 8 de junio de 1812 en Celaya, el cadáver fue descuartizado, la cabeza fue colocada en la calle conocida actualmente como La Cabecita, se dice que una mano se envió al cerro de San Miguel y la otra a Salamanca. Durante años sus restos mortales permanecieron sin sepultura, al ser consumarse la independencia, se colocó su cabeza en un nicho de la iglesia de Celaya.
Padre Rafael García
Participó en el ataque a Valladolid en julio de 1811, en donde junto a otros integrantes del movimiento reunieron a casi 10 mil hombres y 40 cañones alrededor de la actual Morelia, escasamente defendida por 700 soldados y ciudadanos voluntarios dirigidos por Torcuato Trujillo.
En agosto de 1815 es perseguido por Higinio Juárez, vencido y aprehendido en Rancho Redondo con decenas de sus colaboradores, algunos de ellos fueron pasados por las armas en Vilella; pero los de mayor rango fueron trasladados a San Luís Potosí; allí el 22 de agosto se cumplió la pena de muerte contra del “Padre Garcilita”.
Un lugar lleno de historia
El museo Hidalgo al igual que en otros que hay a lo largo del territorio nacional, se conservan objetos que fueron testigos de la guerra de Independencia que inició en 1810, en estos espacios se respira la historia al observar detalles de la lucha que encabezaron los héroes patrios, esos personajes que han trascendido a través del tiempo y que particularmente en septiembre alimentan el orgullo del pueblo mexicano.
Este recinto se inauguró como galería en 1985 y empezó a funcionar de manera oficial como Museo Hidalgo en 1994, desde esa fecha se ha convertido en un atractivo para la gente que visita Salamanca, atrae lo mismo a niños, jóvenes y personas adultas.