A través del proyecto Policía Por un Día encabezado por la Asociación Voluntaria Salmantinos en Acción (AVSA), se cumplieron los sueños de Adbiel Adonaí Corrales y Jesús Abraham Miranda Pérez, pequeños que padecen enfermedades terminales y niños con capacidades diferentes
En ese sentido, representante de la Asociación, Saúl Caudillo Lanuza, dijo que, a través de este proyecto se ha cumplido el sueño de tres pequeños en coordinación con la comisaría local, graduándose simbólicamente como cadetes de generaciones de policías.
“Cualquier niño que sueñe con ser policía puede ser parte del proyecto, siempre y cuando tenga la autorización de sus padres. Antes del evento, los llevamos a conocer las unidades, interactuar con los elementos y visitar diversas áreas del C4. Después de esto, platicamos con los padres para obtener su autorización y acordar si podemos compartir la experiencia en redes sociales”, explicó.
Añadió que, aunque el proyecto está enfocado principalmente en niños con capacidades diferentes o enfermedades terminales, también se podría hacer un evento simbólico para otras personas que deseen cumplir este sueño.
Uno de los casos más recientes es el de Abraham, un niño que lucha contra el cáncer y que soñaba con ser policía. Su madre, Cecilia Pérez, compartió la alegría de su hijo al participar en esta iniciativa: “Mi niño tiene sarcoma en tejido blando en la pierna derecha. Estamos en la quinta sesión de quimioterapia, y entre todo esto, el señor Liborio le cumplió su sueño de ser policía. Abraham estaba muy emocionado y contento porque le dijeron que el evento sería el 13. Este tipo de acercamiento es muy positivo porque les enseña a valorar el trabajo de los elementos de seguridad y a entender las acciones que realizan para proteger a la ciudadanía”.
Además, también, se contó con el caso de Adonaí, un pequeño de cinco años con Parálisis Cerebral causada por una mal cuidado al nacer y la falta de oxígeno.
▶️ Suscríbete a nuestra edición digital
El proyecto “Policía por un día” no solo brinda momentos de alegría a los pequeños, sino que también fomenta un vínculo positivo entre la comunidad y los cuerpos de seguridad, fortaleciendo los lazos de empatía y apoyo.