Durante varias décadas la colonia La Cruz, ubicada en la zona poniente del municipio, fue considerada un punto rojo de inseguridad, al registrar una gran cantidad de robos, asaltos y hechos dolosos, lo que generó que se encasillara como un de las zonas más peligrosas de Salamanca, sin embargo, desde hace cuatro años los habitantes de este lugar se han esforzado en cambiar la imagen de la misma mediante acciones que hay ayudado a reducir las incidencia delictivas.
En ese sentido, Ana Laura Alonso Grande, representante la colonia La Cruz, señaló que las familias han buscado alternativas para cambiar la percepción de la ciudanía con respecto a la colonia, entre las que destacan la limpieza de calles y grupos de ayuda para reducir los casos de adicciones, así como la mejora de la escuela y la colonia en general, no obstante, estas labores también se han logrado con apoyo del gobierno municipal.
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“Nosotros tratamos de apoyarnos unos a otros, gracias a Dios hemos salido adelante, porque ya ha bajado más la delincuencia, nos unimos para hacer algo por nuestra colonia, salimos a barrer y entre familias nos mantenemos pendientes de lo que realizan nuestros hijos, todavía falta mucho, pero poco a poco lo vamos logrando”, dijo.
Explicó que desde que decidieron trabajar en pro de su colonia se han comenzado a abrir las oportunidades laborales para su gente, ya que debido a la situación de inseguridad, las oportunidades para sus habitantes eran negadas debido a la percepción que tenían sobre la colonia, pero ahora eso está cambiando con el apoyo de todos los habitantes.
“Ya tenemos más puertas abiertas, no es como antes que nos negaban un trabajo por la zona de donde éramos, hemos trabajado bien y gran parte de esto se debe al apoyo del gobierno, que nos ha ayudado con seguridad para reducir los índices de seguridad, nos ha costado, pero los resultados poco a poco están dando frutos”, finalizó.
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La colonia La Cruz era considerada una zona de riesgo, por los altos índices delictivos que registraba y generaron que muchos servicios como motoenvíos, taxis o concesionarias de transporte se restringieran ante el riesgo de ser asaltados, sin embargo, sus habitantes han buscado mejorar la percepción poco a poco.