Temporada invernal registra cuarta precontingencia ambiental

El gobierno municipal, emitió las siguientes recomendaciones para proteger la salud y minimizar los efectos negativos

Sanjuana Medrano / El Sol de Salamanca

  · jueves 22 de febrero de 2024

Se registró muy mala calidad del aire, situación que se repitió en los municipios de Celaya y Silao. / Fotos: José Almanza / El Sol de Salamanca

La mañana de este jueves a las 10:50, se activó la cuarta fase de precontigencia ambiental de la temporada invernal en Salamanca, al alcanzar un promedio horario de 142.91µg/m3 de PM10 y de 229.82 µg/m3 en el promedio móvil de 24 horas, problemática que ha derivado de la desatención de los tres órdenes de Gobierno al no atender la modernización industrial, ni la migración a energías limpias en el corredor industrial de Guanajuato.

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De acuerdo al reporte de la Territorial (SMAOT), informó que la activación se generó en la estación Nativitas, en donde, se registró muy mala calidad del aire, situación que se repitió en los municipios de Celaya y Silao, por lo que, se pide a la población evitar actividades y acudir al médico en caso de presentar alguna afectación respiratoria.

En ese sentido, el gobierno municipal, emitió las siguientes recomendaciones para proteger la salud y minimizar los efectos negativos como limitar el uso de vehículos particulares, en la medida de lo posible, reducir el tiempo de exposición al aire libre y mantenerse informados sobre el estado de la calidad del aire a través de fuentes oficiales, así como contribuir a la reducción de emisiones contaminantes mediante el uso responsable de recursos y adopción de prácticas amigables con el medio ambiente.

Las partículas PM10 son aquellas partículas sólidas o líquidas de diferente composición y tamaño (polvo, cenizas, hollín, partículas metálicas, cemento o polen) que se encuentran dispersas en la atmósfera y que tienen un diámetro aerodinámico menor que 10 µm.

La exposición a la contaminación por partículas tiende a afectar en su mayoría a personas con enfermedades cardíacas o pulmonares, niños y adultos mayores, lo que puede provocar síntomas respiratorios aumentados, como irritación en las vías respiratorias, tos o dificultad para respirar.