En vísperas de que se ejerza total transparencia en la vida de los sindicatos, la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) aprobó un padrón amañado y es responsable de todas las anomalías que llevaron a la empresa canadiense Americas Gold & Silver Corporation a abandonar el país, aseguró Carlos Pavón Campos, líder del Sindicato Nacional Minero Metalúrgico (SMM).
Se trata del contrato de trabajo de la mina San Rafael, en Cosalá, Sinaloa, que maneja Napoleón Gómez Urrutia, que se instrumentó de manera amañada la titularidad a su favor, ante lo cual, la corporación canadiense, decidió abandonar el país, según precisó.
Pavón lamentó la salida de dicha empresa ante la suspensión ilegal de labores del sindicato del actual senador por Morena, desde el pasado 26 de enero, que “a pesar de que su agrupación no es titular del contrato colectivo de trabajo”.
“Desgraciadamente, desde inicios de este año la mina que operaba Trituradora Minera del Noroeste, está parada, sin que haya autoridad que someta a la legalidad a quienes la bloquearon. Durante todo este tiempo, los trabajadores no perciben salario y se muestra una imagen ante la inversión extranjera que no les interesa solucionar el problema”.
El líder de los mineros Pavón Campos, señaló que Yasser Beltrán, es el operador de Gómez Urrutia y es quien mantiene el bloqueo de la mina, mediante amenazas a los trabajadores. “Además, presume que tiene relación con el crimen organizado de la zona, lo cual es sumamente preocupante”.
El contrato colectivo de trabajo se encuentra legalmente en disputa entre el SMM y el de Gómez Urrutia y consideró “como penoso que se cierre una empresa, que percibe que no hay estado de derecho, por el capricho del senador de Morena, a pesar de que existen denuncias de los trabajadores de la mina en su contra”.
También señaló que a la JFCA le urge solucionar a favor del líder sindical morenista el recuento de trabajadores de la mina San Rafael, debido a que en octubre dejará de tener esas funciones porque empezará a operar el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral.
Denunció que “la JFCA no informó al sindicato que encabeza, como parte interesada, de la audiencia que se realizó el jueves de la semana pasada, para avanzar en el caso”.
Y no hay nada claro sobre sí el próximo viernes 11 de septiembre, se realizará el recuento de trabajadores debido a que existen muchas distorsiones, entre ellas, la intención de que se reconozca solo el padrón que presentó en marzo pasado Gómez Urrutia.
De acuerdo a la ley, dijo Pavón Campos, debe tomarse en cuenta el último padrón de trabajadores porque es el más reciente; “pero lo que quieren es un padrón rasurado, quitar a toda la gente que puede votar por nosotros”.
Afirmó: “hay muchas anomalías y eso nos coloca en plena indefensión. No tenemos el apoyo de la Junta ni lo queremos, pero que sí se aplique lo que por ley corresponde”.
E insistió en su denuncia de que la JFCA maniobra para darle todas las garantías al senador de Morena, “aunque no lo quiera la gente. La Junta está cargada hacia su causa y servicio. Da la impresión que el legislador marca los acuerdos que se deben tomar”.
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