Días oscuros para el periodismo: asesinan a Victoria Marinova y desaparece Jamal Khashoggi

Medios de comunicación de todo el mundo y organismos internacionales han expresado su indignación por la brutal muerte de la comunicadora Viktoria Marinova en Bélgica y la desaparición del periodista saudí Jamal Khashoggi, quien presumiblemente fue asesinado en el consulado de Arabia Saudita en Estambul por un equipo que tenía como objetivo acabar con su vida.

"Una voz desaparecida"

De acuerdo con dos fuentes que cita el diario The Washington Post, periódico para el que Khashoggi trabaja, el periodista murió a principios de esta semana a manos de un equipo saudí enviado "específicamente para su asesinato".

Estas fuentes, que permanecieron en el anonimato, detallaron que el equipo de 15 miembros planificó el asesinato "de antemano".

Khashoggi, ex gerente general del grupo mediático Al Arab Media Group y columnista del diario estadounidense The Washington Post, desapareció el pasado martes tras entrar en el consulado saudí en Estambul, ciudad donde se encuentra exiliado desde 2017, según denunciaron sus colegas y amigos.

El consulado saudí emitió un comunicado asegurando que el periodista abandonó sus instalaciones el martes, aunque el Gobierno turco, que convocó al embajador saudí en Ankara para pedirle explicaciones sobre el paradero de Khashoggi, afirmó que el intelectual estaba dentro del recinto consular.

La desaparición de Khashoggi generó un gran revuelo en toda la región de Oriente Medio y el diario The Washington Post decidió dejar en blanco la columna del periodista en su edición del viernes bajo el título "Una voz desaparecida".

Marinova fue golpeada hasta morir

El cuerpo de la periodista belga Viktoria Marinova, de 30 años, fue hallado en una zona de difícil acceso cerca de un río en la ciudad de Ruse.

Fungía como directora administrativa y presentadora en el canal de televisión privado regional TVN.

Los medios indican que la víctima fue golpeada con tal violencia que su rostro quedó irreconocible, por lo que no fue identificada hasta la noche del sábado.

El fiscal regional de Ruse, Georgui Georguiev, señaló que trabajan con varias hipótesis, entre ellas la de que el motivo del asesinato esté relacionado con el trabajo de la periodista.

En su último programa llamado Detector entrevistó al periodista búlgaro Dimitar Stoyanov, de la web Bivol, que es socio de WikiLeaks, así como al periodista rumano Attila Biro, miembro del proyecto de periodismo de investigación RISE Romania.

||Con información de EFE||