Culiacán, Sin.- Un juez de control ratificó la prisión preventiva en contra de Brisya Carolina, la única persona detenida hasta ahora por el asesinato del periodista Luis Enrique Ramírez Ramos.
Durante la continuación de la audiencia en la Sede Regional de Justicia Penal Acusatorio y Oral, que se prolongó por más de ocho horas este sábado, la mujer rompió el silencio y decidió comparecer ante el juez Adán Alberto Salazar Gastélum para dar su versión de los acontecimientos.
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Es esposa del presunto autor intelectual del homicidio
La implicada confirmó dos hechos: que J.E.G.G. –a quien se le acusa de ser el autor intelectual del crimen del columnista de El Debate- es su pareja sentimental desde hace varios años, con quien tiene dos hijas, y que sí le marcó a su celular durante la madrugada de aquel 4 de mayo, ante el miedo que tenía porque "una persona quería meterse" a su casa, donde estaba con sus niñas de 7 y 9 años de edad.
Narró que la persona que quería meterse a su casa, a quien aseguró no conocer, en una actitud de enojo repetía muchas veces una serie de groserías y obscenidades hacia ella, intentando tumbar el barandal, pero además parecía que hablaba con otra persona, pero no distinguía qué decía. Por eso le marcó a J.E.G.G.
También sostuvo que sí extravió su celular, pero no en la tarde del 4 de mayo, como relató en su declaración inicial a la FGE, sino durante la mañana del 7 de mayo, justo el día en que le hicieron la entrevista.
Sin embargo, al momento de ser cuestionada por los representantes de la Fiscalía General del Estado, la mujer acusada de ayudar a la fuga de los presuntos asesinos, se reservó el derecho de responder.
Durante la audiencia se hizo público un video obtenido de una cámara de seguridad de un expendio cercano al domicilio de la acusada, donde se observa a una persona con camiseta blanca y pantalón oscuro, quien caminaba “tambaleándose”, pasaba de un lugar a otro, cruzaba la calle y de pronto se quedó en las afueras de una casa haciendo movimientos repetidos durante unos minutos. Era la casa de Brisya Carolina.
En la continuación de la audiencia también fue llamado a declarar un testigo, quien confirmó que vio a esa misma persona ir y venir, estaba “como que loco, como borracho o drogado, como que hablaba solo” y luego se acercó a una casa con barandal negro, mismo que movía “tambaleándose”. El testigo dijo que luego se metió al lugar donde él estaba y a los minutos escuchó dos disparos, pero ya no vio nada ni supo más de qué ocurrió.
Brisya Carolina es acusada de encubrimiento y favorecer a los asesinos de Ramírez Ramos, quien fuera privado de su libertad y posteriormente asesinado el pasado 4 de mayo.
La Fiscalía la acusa del delito de encubrimiento por favorecimiento, luego de que en entrevistas con investigadores sostuvo que le marcó a su pareja a un número telefónico que resultó falsó, además de negarse a proporcionar su equipo celular, mismo que dijo haber extraviado, versión que resultó no ser cierta.
Lo anterior ayudó a quienes, de acuerdo a la relatoría, son los autores intelectual y material del homicidio del columnista de El Debate, J.E.G.G. y S.R.V.V., respectivamente. Contra ambos hay órdenes de aprehensión y están prófugos.
Nota publicada en El Sol de Sinaloa
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