/ martes 22 de febrero de 2022

Albergue de la ONU en Chiapas funciona aunque no al 100% de su capacidad

Desde el 17 de diciembre del 2020 a la fecha, el albergue por la Organización Hospitalidad y Solidaridad A.C. socio de la Agencia de las ONU para los Refugiados atienden a personas solicitantes de asilo o refugiadas

Alrededor de 90 Migrantes de diferentes países son atendidos por la Organización Hospitalidad y Solidaridad A.C. socio de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), en el primer albergue para personas refugiadas que se ubica sobre la carretera Tapachula - Puerto Madero.

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La encargada de Comunicación Social de la organización Hospitalidad y Solidaridad A. C. Nimsi Arroyo, dio a conocer que este albergue atiende a personas que buscan refugio y solicitantes de asilo y no se atiende a migrantes en tránsito.

"Brindamos atención y acompañamiento de personas refugiadas y solicitantes de asilo en Tapachula, desde la inauguración hemos atendido a una población de más de 1,410 personas con alojamiento aproximado de 45 días”.

Al preguntarle sobre los migrantes que buscan refugio o asilo, pero duermen en la calle, dejó en claro que en el albergue solo se atiende a personas referidas que buscan la condición de refugiado en México.

Explicó que en diciembre se inauguró el albergue financiado en su totalidad por la agencia de Naciones Unidas, pero es administrado por la organización Hospitalidad y Solidaridad A.C. que brinda ayuda humanitaria con perspectiva de atención integral.

En un recorrido a las instalaciones del albergue, explicó que se les da alojamiento temporal, acompañamiento en procesos de inserción-integración, además de realizar incidencia política-social, buscando generar condiciones para que México continúe siendo un espacio solidario y hospitalario para las personas víctimas del desplazamiento forzado.

“El albergue es un espacio de personas refugiadas, eso quiere decir que no atendemos a personas que están en tránsito, si no que estén haciendo el trámite o en proceso en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR). Trabajamos en articulación con otros socios de Tapachula, los cuales son organizaciones sociales e instancias gubernamentales que nos canalizan personas para su adecuada atención.”

El albergue tiene una capacidad de 300 migrantes, pero por motivos de la pandemia están operando con un máximo de 180, en este momento tienen a poco más de 90 refugiados.

Desde su apertura se han atendido a más de 1,410 personas con alojamiento desde 45 días hasta seis meses de Honduras, Haití, Venezuela, Chile, Brasil, del Salvador, China, Congo, Pakistán, Siria, Jordania y ven cómo el flujo migratorio está ampliándose no solo de Centroamérica si no también la presencia de extra continentales que se está haciendo más cotidiana en Tapachula.

Sobre las familiares que huyen del fenómeno de las pandillas en Centroamérica, que vienen en las caravanas por miedo a ser asesinados, dijo que se atienden al igual que las otras personas, es decir, bajo canalización de el ACNUR o de alguna otra instancia, para lo cual requieren iniciar su procedimiento ante la COMAR.

Otra de las formas de ingreso al albergue es a través del Programa de Alternativas a la Detención con el Instituto Nacional de Migración, donde las personas que solicitan asilo también son canalizados por ellos, a las que ingresan además de brindarles techo y comida, se les da acompañamiento integral, asimismo, se les hace una valoración psicológica, médica y seguimiento a su caso ante las instancias.

En el interior del albergue hay una escuela denominada “Escuela Sin Fronteras” para los niños, niñas y adolescentes que ingresan al espacio con sus madres y padres, “es una escuela multigrado, cada menor de edad que entra tiene un espacio educativo para que una vez que salen del albergue no les cueste integrarse a una escuela”, por otro lado dijo que se tienen un equipo de fútbol de refugiados que juegan en una liga en Tapachula, un huerto comunitario con el apoyo de Llano de la Lima y Preemptive Love, donde se pretende tener una cosecha de productos para solventar los alimentos para las personas que se atiende, con el cual se busca ser autosuficientes en la cuestión alimenticia.

Dentro de las instalaciones del Albergue se tienen pequeños huertos con producción de papaya, plátano, chiles y un gallinero donde se tienen huevos para los solicitantes de asilo.

Por último, la encargada de Comunicación Social de la organización Hospitalidad y Solidaridad A. C. Nimsi Arroyo, comentó que en este albergue las personas que llegan a Tapachula en búsqueda de protección como refugiados pueden tener una condición digna y segura en lo que tienen una resolución a sus peticiones a través de las instancias correspondientes.

Alrededor de 90 Migrantes de diferentes países son atendidos por la Organización Hospitalidad y Solidaridad A.C. socio de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), en el primer albergue para personas refugiadas que se ubica sobre la carretera Tapachula - Puerto Madero.

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La encargada de Comunicación Social de la organización Hospitalidad y Solidaridad A. C. Nimsi Arroyo, dio a conocer que este albergue atiende a personas que buscan refugio y solicitantes de asilo y no se atiende a migrantes en tránsito.

"Brindamos atención y acompañamiento de personas refugiadas y solicitantes de asilo en Tapachula, desde la inauguración hemos atendido a una población de más de 1,410 personas con alojamiento aproximado de 45 días”.

Al preguntarle sobre los migrantes que buscan refugio o asilo, pero duermen en la calle, dejó en claro que en el albergue solo se atiende a personas referidas que buscan la condición de refugiado en México.

Explicó que en diciembre se inauguró el albergue financiado en su totalidad por la agencia de Naciones Unidas, pero es administrado por la organización Hospitalidad y Solidaridad A.C. que brinda ayuda humanitaria con perspectiva de atención integral.

En un recorrido a las instalaciones del albergue, explicó que se les da alojamiento temporal, acompañamiento en procesos de inserción-integración, además de realizar incidencia política-social, buscando generar condiciones para que México continúe siendo un espacio solidario y hospitalario para las personas víctimas del desplazamiento forzado.

“El albergue es un espacio de personas refugiadas, eso quiere decir que no atendemos a personas que están en tránsito, si no que estén haciendo el trámite o en proceso en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR). Trabajamos en articulación con otros socios de Tapachula, los cuales son organizaciones sociales e instancias gubernamentales que nos canalizan personas para su adecuada atención.”

El albergue tiene una capacidad de 300 migrantes, pero por motivos de la pandemia están operando con un máximo de 180, en este momento tienen a poco más de 90 refugiados.

Desde su apertura se han atendido a más de 1,410 personas con alojamiento desde 45 días hasta seis meses de Honduras, Haití, Venezuela, Chile, Brasil, del Salvador, China, Congo, Pakistán, Siria, Jordania y ven cómo el flujo migratorio está ampliándose no solo de Centroamérica si no también la presencia de extra continentales que se está haciendo más cotidiana en Tapachula.

Sobre las familiares que huyen del fenómeno de las pandillas en Centroamérica, que vienen en las caravanas por miedo a ser asesinados, dijo que se atienden al igual que las otras personas, es decir, bajo canalización de el ACNUR o de alguna otra instancia, para lo cual requieren iniciar su procedimiento ante la COMAR.

Otra de las formas de ingreso al albergue es a través del Programa de Alternativas a la Detención con el Instituto Nacional de Migración, donde las personas que solicitan asilo también son canalizados por ellos, a las que ingresan además de brindarles techo y comida, se les da acompañamiento integral, asimismo, se les hace una valoración psicológica, médica y seguimiento a su caso ante las instancias.

En el interior del albergue hay una escuela denominada “Escuela Sin Fronteras” para los niños, niñas y adolescentes que ingresan al espacio con sus madres y padres, “es una escuela multigrado, cada menor de edad que entra tiene un espacio educativo para que una vez que salen del albergue no les cueste integrarse a una escuela”, por otro lado dijo que se tienen un equipo de fútbol de refugiados que juegan en una liga en Tapachula, un huerto comunitario con el apoyo de Llano de la Lima y Preemptive Love, donde se pretende tener una cosecha de productos para solventar los alimentos para las personas que se atiende, con el cual se busca ser autosuficientes en la cuestión alimenticia.

Dentro de las instalaciones del Albergue se tienen pequeños huertos con producción de papaya, plátano, chiles y un gallinero donde se tienen huevos para los solicitantes de asilo.

Por último, la encargada de Comunicación Social de la organización Hospitalidad y Solidaridad A. C. Nimsi Arroyo, comentó que en este albergue las personas que llegan a Tapachula en búsqueda de protección como refugiados pueden tener una condición digna y segura en lo que tienen una resolución a sus peticiones a través de las instancias correspondientes.

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